Han pasado 11 años, nada más y nada menos, desde que Renault presentó su monovolumen mediano, el Captur, concepto todavía de moda por aquel tiempo. Tres años más tarde lanzaba el Kaptur (sí, con K) para el mercado ruso, y nos preguntábamos si llegaría a Argentina. Visualmente muy similares ambas versiones, pero diferentes en sus raices. Mientras que Captur europeo tomaba plataforma CMF-B del Clio, el ruso utilizaba la más antigua B0 de Duster (a su vez, de Clio vieja generación). A mediados de 2019 llegaría la segunda generación, bastante diferente, bastante «menos monovolumen», y «más SUV», más cuadrada, más lograda, creo.
Hace unos meses Renault adelantó de manera oficial una imagen del restyling de aquella segunda generación, con un fuerte cambio visual en el sector frontal, compartido con el renovado Clio y los últimos Renault europeos, como el Rafale y la Scenic. Una nueva firma lumínica de la marca francesa, que también adopta, con ciertas diferencias, nuestra Kardian y que ya fuera presentada en Brasil. El restyling de Captur es el último que recibirá antes de una nueva generación eléctrica, quizás hacia 2026 o 2027. Comenzando por sus motores, no hay novedades. Sigue el 1.0 triciliíndrico de 90 CV (100 en GLP) y los híbridos suaves (pero con batería de 12 v) 1.3 TCE, de 140 CV y 160 CV.
También, el híbrido más potente, sobre la base del conocido 1.6 y con muy interesantes 250 CV. Caja manual o de doble embrague, ambas de 6 relaciones. Visualmente se muestra (casi) sin cambios desde el lateral, con algunos leves en la parte posterior, pero importantes en el sector frontal, como ya comentamos. Este nuevo lenguaje estético de Renault (adelante) me resulta algo recargado, algo tensionado, y sobre todo en este caso de la Captur, más allá que lo estético es casi totalmente subjetivo. De frente parece otro auto, y de perfil se muestra su capot más plano, alejándolo aun más de aquel concepto monovolumen inicial. Creo que, al igual que Kardian, muestra cierto divorcio entre la trompa y la cola.
En el interior solo la pantalla y algunos detalles en el tablero, digital. Aparece una gran versatilidad en la elección de los colores (techo, resto, espejos, etc.), permitiendo varias combinaciones. Otra novedad importante viene por el lado de las ADAS (Ayudas a la Conducción), incluso pudiendo alcanzar Conducción Autónoma Nivel 2. Audio Harman Kardon de 9 parlantes disponible y 4 modos de conducción. También estrena versión (de apariencia) deportiva Esprit Alpine, con llantas de 19″ y varios detalles visuales, deportivos. Interesante puesta al día para un modelo de muy buenas ventas en Europa.
