Aunque veníamos hablando tiempo antes de la 3a generación del 308 (la primera se produjo en Argentina hasta hace unos años), hace casi exactamente 4 años, Peugeot presentaba al mundo su nuevo 308, con una profunda renovación, muy moderno, atractivo, con un diseño personal y exitoso, a mi juicio. Y como suelo expresar, 4 años es un lapso de tiempo más que prudencial para que un modelo pase por el quirófano, o al menos por un tratamiento estético con botox. Y es lo inminente para el hatchback francés que también presenta una muy atractiva versión SW (cualidad histórica de las rurales de Peugeot) y que se vende en variantes térmicas, híbridas y eléctrica.
Aunque esta generación nunca llegó al Argentina (¿lo hará post restyling?), sí lo hizo la anterior, cuya versión GT probamos (un GTI edulcorado, digamos), y me dejó una muy buena impresión. Esta renovación de la tercera generación del 308 se presentará en el otoño europeo (nuestra primavera) y básicamente será una adaptación visual a sus hermanos 3008/4008 y 408, en el sector frontal. Puesta al día en el resto de su carrocería y sin cambios mecánicos. ¿Y no aprovechará Peugeot para traer nuevamente a la vida al GTI? Bueno, sería una excelente noticia, sobre todo después de la confirmación del futuro 208 GTI eléctrico, pero por ahora son solo especulaciones. Podría ser el híbrido PSE de 360 CV que monta el 508. Veremos.