Luego de haber probado el Abarth 595 Turismo hace unos años, puedo dar fe de la «magia» y el arrastre que tiene la marca italiana en todo el mundo. Claro, no son los M de BMW, ni los RS de Audi ni los AMG de Mercedes-Benz, pero realmente consiguen como pocos generar una adrenalina a bordo digna de segmentos y prestaciones superiores. No voy a decir que sentí similar adrenalina a la que recibí a bordo del BMW M340i: claro que. Son prestaciones diferentes y precios muy diferentes. Pero puedo asegurar que en cuanto a relación prestaciones-diversión/precio, el Abarth 595 resulta insuperable. Hace poco más de un año dábamos cuenta de la presentación del primer Abarth eléctrico, sobre la base del Fiat 500e, con 156 caballos que,siendo eléctricos, no resultaban deficitarios, pero tampoco asombrosos.
Ahora, Abarth presenta (o presentará en 2024, mejor expresado) su segundo producto eléctrico (como otras automotrices, ya no más lanzamientos con motores térmicos), sobre la base del Fiat 600e, algo que habíamos adelantado a mediados del año pasado. El primer dato más que positivo (y uno de los pocos que han trascendido) tiene que ver con su potencia: más que interesantes 240 CV, que lo convertirán en un auténtico deportivo. Utilizará (estrenará) la plataforma Perfo-eCMP, una evolución de la conocida eCMP (Peugeot e208, Citroën ë-C3, Opel Corsa e, etc.) apuntando a mayores prestaciones.
Claro, no hablamos solo de potencia cuando hablamos de un modelo que apunta a sensaciones deportivas. El Abarth 600e tendrá una suspensión específica, frenos de mayor tamaño y eficiencia, neumáticos especiales, Diferencial de Deslizamiento Limitado, Butacas envolventes y algunos otros detalles. Se supone su tracción será delantera, aunque no hay datos acerca de su batería y por lo tanto tampoco de su autonomía. Se espera una batería de mayor capacidad que la de su primo hermano «normal» Fiat 600 e para que no caiga fuertemente el alcance. El nuevo 600e será el Abarth de serie más potente de la historia, ni más ni menos.
