Bueno, el título formula una pregunta muy amplia, o en todo caso exige una respuesta bastante abarcativa. Pregunto ¿qué pasa con Stellantis? en relación a su presente, para nada el mejor desde que nació como grupo, y dividiría el tema en 2 partes; una principal que tiene que ver con la pata norteamericana (Jeep, Chyrsler, Dodge, RAM) y otra particularmente con el Fiat 500 europeo, tema menor respecto al anterior pero que suma en esta ¿complicada? situación económica del grupo, o en todo caso bastante por debajo de sus previsiones. Comencemos por el tema Estados Unidos.
Cuando Fiat (que ya era grupo), compró el grupo Chrysler, si bien se llamó FCA, Fiat Chrysler Automobiles, la italiana quedó con casi todo el poder en esta «asociación». Y hay que reconocer que (si no recuerdo mal) allá por 2009, cuando la industria europeo pasaba un mal momento, la pata norteamericana salvó, exagerando un poco, a la marca fundada por Don Agnelli. Más adelante la situación se invertiría, pero lo cierto es que hasta ahora, había un cierto equilibrio en cuanto a fortaleza en ventas y presencia. Con la llegada de Stellantis, hubo un fuerte plan de salvataje de Alfa Romeo y Lancia, que creo terminará dando sus frutos, pero los norteamericanos sienten que se ha hecho poco por sus marcas.
Sobre todo en el caso de Chrysler, mítica automotriz, hoy con un solo modelo (la minivan Pacífica) y prácticamente desconocida (similar al caso Lancia). La cosa no va mucho mejor para Dodge, si bien tiene algo más de producto y de éxito. En todo caso, la que ha mantenido la buena salud económica, ha sido Jeep (en menor medida RAM), marca muy elegida por aquellos habitantes. En estos últimos tiempos, se han dado algunos recalls y problemas con algunos modelos de esta marca, sobre todo con Wagoneer (en la foto de portada) y sus ventas están bajando fuertemente también, con lo cual, podemos adivinar fácilmente el cuadro de situación.
Las marcas han reducido su participación a la mitad, y los concesionarios culpan al mismísimo Carlos Tavares, mandamás de Stellantis, quejándose por la falta de un plan serio de rescate de Chrysler y mejoras para Dodge y el resto (uno de sus descendientes fue noticia en tal sentido, hace poco). Se habla de cierre de plantas, de una fuerte restructuración, despidos; en fin, nada muy bueno. Tal es así que el mismo Tavares debió salir a aclarar en estos días, que ni Dodge ni Chrysler estaban en venta. Además, se quejó de estos planteos, catalogándolos de infundados, contando incluso que se venían grandes inversiones para las marcas norteamericanas de Stellantis.
Relacionado con esto, Antonio Filosa (conocido en Argentina), a cargo de Jeep en Estados Unidos, se refirió al retraso del lanzamiento comercial del nuevo y eléctrico Jeep Wagoneer S. «Quiero calidad perfecta, y sé que estamos cerca pero cerca no es suficiente», y agregó, «Una fecha cercana no es prioridad, sí lo es la perfección». Parece que no está tan conforme con las primeras unidades (pre serie) del Wagoneer S y quiere que el primer Jeep eléctrico sea un modelo de referencia. Finalmente, respecto al Fiat 500 (Europa), se dan dos situaciones.
El 500e, eléctrico, que se fabrica en Italia, en Mirafiori, no cuenta con ventas suficientes (mal de muchos eléctricos actuales) y el 500 térmico que se produce en Polonia no seguirá por un tema de normas contaminantes. Por eso, en un hecho inédito, a partir del 500e, están preparando un 500 híbrido que será fabricado junto con el eléctrico. ¿Corren peligro de extinción las marcas norteamericanas de Stellantis? No tanto, sobre todo Jeep y RAM, pero están atravesando un situación complicada. Lancia y Alfa Romeo parecen estar arrancando, veremos como sigue el mercado norteamericano. En nuestra región la situación es bastante distinta, mucho más saludable, de liderazgo.
