Las coreanas, tanto Hyundai como KIA, vienen siendo protagonistas en Automotiva, y por una (o varias) sencilla razón: dan que hablar. Por tecnología, por diseño, por calidad, por innovación, al menos estética. Basta con ver el nuevo Staria, raro monovolumen, o el nuevo SUV Tucson, pudiendo agregar la inédita pick up Santa Cruz. Pero también, innova en cuanto al avance de sus variantes deportivas, las «N», casi una submarca. Presentó el Kona N, y también, basado en el modelo del rally mundial, el i20 N. Sin dejar de mencionar al posible primer N eléctrico, derivado del Ioniq 5.
Pues bien, otro avance viene con el nuevo Elantra N, primer sedán deportivo de la marca coreana. Claro, de aquel Elantra de 2a generación que tuvimos en Argentina, al actual, presentado en 2020, ha «pasado mucha agua bajo el puente». En momentos en los que pareciera que todo pasa por el mundo SUV, y eléctrico, celebramos que Hyundai apueste por seguir ampliando el portfolio de su marca N. Con 4.67 m de longitud, el nuevo Elantra N cuenta con nuevos paragolpes, frente «todo negro», llantas de 19″ de diseño específico, un menor despeje al suelo, pinzas de frenos y detalles en rojo, y en el interior, volante, pomo de la caja, butacas deportivas, pedalera en aluminio y algunos otros detalles. No tanto, como suele ocurrir en las variantes N de Hyundai.
El motor es el conocido en los demás N, el 2.0 turbo de 280 CV, con tracción delantera, y caja manual de 6 relaciones o de doble embrague de 8. Con este «equipo técnico», el Elantra N consigue llegar a los 100 km/h en 5.3 segundos, curiosamente, por debajo del nuevo i30 N (seguramente más liviano). Aunque probablemente a mediano plazo siga reduciéndose la variedad de modelos otrora populares como sedanes, hatchbacks, etc., por ahora podemos disfrutar de este sedán prestacional coreano. ¿Lo tendremos en Argentina? Prácticamente descartado.