Excelente noticia, claro. Y no solo para los más fanáticos del mundo del automóvil y de los modelos prestacionales «accesibles» como el histórico GTI de Peugeot. Pero no puedo avanzar sin decir que vuelve, sí, pero solo eléctrico. No es novedad, ya se sabía y lo comentamos en varias oportunidades. Sobre la base del e-208 recientemente renovado, Peugeot presenta su versión más interesante, con la dosis justa de personalización deportiva, sin acercarse al mundo del tunning. Fiel a su historia; los GTI siempre fueron visualmente parecidos al resto de la familia, con una impronta deportiva innegable, pero racional.
¿Serán sensaciones similares a las que se vivían con los anteriores GTI nafteros? Vaya a saberlo, de antemano. Probamos el último 208 GTI y realmente era adictivo. Creo que con los eléctricos (y las reacciones de la gente) pasan dos cosas. Por un lado, claramente, para los más ortodoxos, un auto que no tenga escape, sonido, esa adrenalina de «la nafta», ya arranca perdiendo el partido. Y algo de cierto hay. Aunque quizás, también es un poco de costumbre. Manejé varios eléctricos, y entre ellos el Megane E-Tech, y sinceramente me encantó, aunque, claro, más o menos subjetivo, se extraña el motor de combustión.
Ya en 2021 nos planteábamos si llegaría finalmente la reencarnación del GTI en Peugeot, y finalmente se dio, con el e-208 GTI. Tal como anticipamos, toma la misma mecánica EV de sus primos hermanos Lancia Ypsilon HF y Abarth 600e, entregando 280 CV. A 40 años de la presentación del iniciador de la era GTI, el Peugeot 208 GTI, la marca francesa vuelve a ofrecer un modelo con esa sigla. Y lo hace en un marco difícil de mejorar: Las 24 hs de Le Mans. Nada más y nada menos. Como si faltara algo para mostrar sus intenciones. Su autonomía es de 350 km. ¿Suficiente? Difícil respuesta. Seguramente si la autonomía de los eléctricos rozara los 800/900 km, ganarían más adeptos, pero bueno, por ahora no se da (sí en el futuro cercano).
Sus 280 CV superan y por mucho los 208 CV de su antecesor, y seguramente será uno de los argumentos a favor para convencer a los fanáticos acerca de la nueva era GTI en Peugeot. Visualmente aparece más ancho, cerca de 6 m en las vías delanteras, bastante menos atrás. Cambian paragolpes, parrilla y ópticas aunque, no radicalmente, lo justo para mostrar «las garras». Atrás difusores y en el interior espectaculares butacas deportivas y varios detalles. Quizás lo más notorio venga de la mano de sus enormes llantas de 18″, que evocan a su abuelo, efecto logrado. Acelera de 0 a 100 km/h en 5.7 segundos, muy interesante valor para un GTI. El diferencial autoblocante completa el aspecto técnico. ¿Llegará a Argentina? Hummmm… pero no me animo a descartarlo.
