A pesar que naufragó por mares «económicos tempestuosos» (salió rebuscada la frase….), y luego fue adquirida por la china Geely, lo que podía presagiar un futuro aun más incierto, la realidad es que Volvo vive un presente muy interesante. Quizás, sería más exacto decir que vivió un presente muy exitoso hasta hace pocos años, con productos reconocidos en todo el mundo, manteniendo su histórico prestigio de calidad y seguridad. Pero, como tantas otras automotrices, debió cambiar de paradigma para mutar hacia un mundo eléctrico y SUV, para resumirlo de algun modo, si bien Volvo ya tenía XC40, XC60 y XC90. Y se encuentra abocada en ese cambio para enfrentar los próximos eléctricos años.
Sí, Volvo ya vende el XC40 Recharge Pure Electric, y como su nombre lo indica, se encuadra en lo que se conoce como vehículos EV o BEV. De todos modos, este EX90 que está presentando al mundo, supone un gran paso hacia la electrificación total que, dejará a la marca sueca con motores solamente a batería a partir de 2030. A mediados de 2021 comenzábamos a hablar de la próxima generación el XC90, y a fines de ese año contábamos que llegaría en versiones ICE (motor a combustión) y EV (eléctrico). Finalmente, hace un par de meses adelantábamos que el nuevo XC90 eléctrico se llamaría EXC90. Bueno, casi acertamos porque finalmente fue bautizado como EX90, quizás buscando diferenciarse por completo de su hermano con motores térmicos e híbridos. Y estéticamente lo ha logrado, ya que si bien resulta bastante similar al que conocemos, mirando detenidamente encontramos un modelo diferente (y para 7 pax).
Construido sobre la plataforma SPA2, la misma de su primo hermano Polestar 3, cuenta con 2 motores eléctricos, uno en cada eje (tracción integral, por lo tanto) con dos niveles de potencia y par: 414 CV / 770 Nm y 517CV / 910 Nm. Bastante. Y a pesar de sus 2,800 kg de peso, el EX90 consigue acelerar de 0 a 100 km/h en solo 4,9 segundos. Tremendo. Está construido con materiales reciclados (en parte) y destaca su sistema LIDAR, que puede reconocer peatones a una distancia de 250 km, gracias a una nueva cámara en el parabrisas. También ofrece nivel de Autonomía 3 y un sistema que alerta sobre la presencia de personas o animales dentro del habitáculo en días de mucho calor, estacionado por ejemplo. Otro detalle «chic» tiene que ver con las ópticas LED y su función «parpadeo», similar al ojo humano. Interesante nuevo Volvo EX90.