¿Ferrari LaFerrari?
No es un juego de palabras ni un acertijo. Es el nombre del nuevo producto de la casa de Maranello, que podría considerarse sucesor de la trilogía F40 (1987 – 487 CV), F50 (1996 – 520 CV) y Enzo (2002 – 660 CV). Siguiendo la lógica, Enzo debía llamarse F60, pero Ferrari guardó ese nombre para el monoposto de Fórmula 1 de 2009, aunque, suele reconocerse a Enzo con ese código.

Y estos productos (¿no será un sacrilegio llamarlos así?) tienen que ver con conmemoraciones de la marca, como la F50, por los 50 años de la marca. Luego de la última Ferrari «especial», la Enzo, todos esperábamos con cierta ansiedad el anuncio del sucesor de aquella trilogía. Y acaba de aparecer, con un único defecto visible: el nombre. Luego de nomenclaturas atractivas (todas las F, Enzo, Italia, Scaglietti, etc.), denominar a la última «bestia de Maranello» como «LaFerrari», además de poco original, es hasta poco fonético. Está bien, han querido transmitir el concepto de ésta es «La» Ferrari, y se entiende, pero no termina de convencer.

Dejando de lado esta pequeñez semántica, la nueva LaFerrari es descomunal por donde se la mire. Con una trompa que recuerda a la 458 Italia, gran voladizo delantero y tren trasero pegado a la cola, LaFerrari destila diseño desde todos los ángulos posibles. ¿Podría alguien quedar indiferente a su paso? Con seguridad no, por más desinteresado por el mundo del automóvil que pueda uno ser, sin dudas, girará su cabeza cual muñeco para ver esta belleza  de otro mundo.

Además de la típica ansiedad que despierta Ferrari ante cualquier lanzamiento, el nuevo modelo llegaría para completar la trilogía explosiva en cuanto a deportivos ultra radicales del momento, junto con McLaren P1 y Lamborghini Veneno, tridente espectacular que tiene en vilo a los amantes del automóvil.

McLaren P1, el último desarrollo del exclusivo fabricante inglés cuenta con tecnología híbrida, con un motor naftero y otro eléctrico, que en conjunto entregan 916 CV. Solo se fabricarán 375 unidades, y su precio superará el millón de euros. Acelera de 0 a 100 en menos de 3 segundos.

Lamborghini Veneno, desarrollado sobre la base del muy atractivo Aventador, cuenta con motorización naftera de 750 CV, se fabricarían (a propósito lo ubicamos en potencial) únicas 3 unidades, a 3.6 millones de euros. De 0 a 100 km/h en 2.8 segundos.

Pero, habiendo descrito suscintamente a sus competidores, volvamos a nuestra LaFerrari de la nota, también híbrida. Todo lo que sigue en cuanto a datos, es escalofriante. Motor V12 de 6.3 litros, 960 CV (800 del motor naftero y 160 del eléctrico), menos de 3 segundos para el «0 a 100», menos de 7 segundos para llegar a los 200 km/h y una velocidad máxima que supera los 350 km/h, aunque no está confirmado el valor exacto (¿Importa mucho en ese rango si son 20 o 30 km/h más o menos?).Con 4.7 m de longitud, y solo 1.12 m de altura (ya que no podemos ver una, al menos por ahora, sugiero medir poco más de un metro desde el suelo e imaginarse en ese plano al techo de LaFerrari..), la fibra de carbono domina la carrocería y partes mecánicas, con enormes frenos cerámicos Brembo y cubiertas traseras 345/30R20. Amortiguación con variación magnética, sistema de recuperación KERS como la F1, una rapídisima caja de cambios y una particularidad llamativa: la butaca del conductor (¿importa la otra?) no se regula, sí lo hacen volante y pedales.Solo se construirán 499 unidades de LaFerrari y su precio será de 1.3 millones de euros. Casi nada. ¿Podremos verlo? Ojalá.