Ya pasaron más de 5 años desde que Ford presentaba al mundo un nuevo crossover, bautizado Puma, que sin embargo poco y nada tenía que ver con aquella coupé pequeña del siglo pasado. Así como Ecosport fue la versión «SUV» del Fiesta, Puma es la variante crossover del casi extinto Fiesta europeo. Y ya en 2022 adelantábamos que Ford preparaba un Puma eléctrico, lo que se está materializando ahora. Además, la marca del óvalo aprovecha para aplicar un muy sutil rediseño exterior, pero radical y profundo puertas adentro. La nueva versión eléctrica recibe el nombre de Gen-E.
El nuevo Puma EV se fabricará en Rumania (las marcas europeas cada vez producen menos en el continente, algo razonable por los mayores costos involucrados), apunta al nuevo KIA EV3, mantiene la plataforma del actual Puma (térmico e híbrido), cuenta con una potencia de equivalentes 168 CV, más que interesantes, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 8 segundos, muy buen valor. No tan bueno es el de la autonomía, que se queda en 370 km, aunque más que suficientes para un uso urbano, supuestamente su destino más habitual. Con ayudas (Plan MOVES) arrancará en los 26,300 euros.
A nivel visual solo un leve retoque en el sector frontal, con renovados paragolpes y parrilla, y ópticas con nueva distribución interior. Atrás aun más sutiles. En el interior, todo nuevo. Tablero digital, consola central, casi todo salvo contrapuertas, no tan diferentes. Pantalla central bastante bien resuelta y no tan grande como Tesla (elogio). De todos modos las automotrices están comenzando a volver a comandos físicos, porque además las pruebas de seguridad (EuroNCAP) tendrán en cuenta esto, como parte de la eficiencia en el rubro. Puma nunca llegó a nuestra región, como tampoco el Fiesta en el que se basó.