No, no es un error de tipeo en el título. Una humorada, quizás sí. Estamos presentando la nueva generación del Mitsubishi ASX, que está basado en el Renault Captur europeo (una generación más nueva que la del nuestro, brasileño). En realidad, más que «está basado», se trata de una réplica del modelo francés, con cambio de logos y poco más. ¿Tiene sentido la jugada de Mitsubishi? Sí, y por varias razones. Primero, «los números manda», acá y en todo el mundo, y no solo en el ambiente de los autos. Y la verdad es que la marca japonesa, que me encanta, por cierto, viene con problemas económicos crecientes, y necesita revertir urgente resultados económicos. No le esta yendo mal con Outlander y L200, pero no alcanza.

ASX es un interesante modelo pero necesitaba una renovación y la más fácil y económica era tomar al Captur y «loguearlo» con ojos rasgados, algo que habíamos adelantado. Esto, más allá que Renault está trabajando en la nueva generación Captur, que también derivará en la próxima generación ASX. Pero para eso faltan «un par de años largos». Por ahora, lo más accesible fue vender al Captur como Mitsubishi ASX, algo que hacen muchas marcas y hay numerosos ejemplos en la industria automotriz. Se especuló en algún momento con que ASX tomaría al Clio europeo, pero finalmente fue con Captur, que de todos modos deriva de aquel.

¿En que se parece el nuevo Mitsubishi ASX con el modelo francés? En todo. Más sencillo resulta mencionar las pocas y leves diferencias. En el exterior, parrilla y logo, lo mismo atrás, y nada más. De hecho, las llantas también son compartidas. En el interior, nuevo volante y logo y casi nada más. Con lo cual, se trata prácticamente de un clonado, algo habitual en el mundo del automóvil. ¿Qué motores toma el nuevo ASX? Bueno, como era de esperar, y por todo lo dicho antes, los mismos que los de su primo hermano. En el escalón inicial, el 1.0 turbo de 3 cilindros y 90 CV. Luego, el moderno 1.3 TCe que equipa a varios modelos, entre ellos a Renault Duster, con 140 CV o 160 CV y cambio manual o automático, y los híbridos E-Tech de 145 CV y 160 CV, con una autonomía eléctrica de limitados 40 km.