Clio y la serie 206/207 combatieron desde hace tiempo, desde el nacimiento de sus plataformas. Y con el tiempo ambos se han ido armando hasta los dientes, buscando no darse la más mínima ventaja, tanto en producto como en marketing. Quizás el puntapie inicial fue de Peugeot, que reemplazó al veterano 104 con el 205 en 1983, modelo que salvó a la marca francesa de una situación económica muy complicada y que alcanzó rapidamente el adjetivo de «suceso» a partir del enorme éxito deportivo y de marketing en el Rally Mundial, con aquellos 205 T16 del inolvidable grupo B.
Renault, que en ese tiempo tenía en el Supercinco (R5) un modelo de gran éxito comercial, y también en el Rally Mundial, acusó recibo más tarde y en 1988 presentó el Clio, cuya denominación mantuvo hasta nuestros días, tiempo en el que presentó 4 generaciones de su pequeño y exitoso modelo. A su vez, Peugeot no podía dormirse en los -merecidos- laureles de su 205 y en 1999 lanzó el 206, con importante presencia también en el rally.
Luego vendría el 207, a criterio personal, y hablando de «suceso social» y no necesariamente de resultado comercial, el menos logrado de la saga, siendo que, a su vez, 206, aun triunfador, no consiguió la trascendencia de 205, «el original».
Hasta acá pura historia. 2012 vería el último armamento tecnológico de ambas automotrices francesas: Clio IV de Renault y 208 de Peugeot. Más que nunca, ambos contendientes están «armados hasta los dientes». Algunas similitudes entre ambos modelos:
Dimensiones (LaxAnxAl): Clio (4.06×1.73×1.45) – 208 (3.98×1.74×1.46)
Gama de precios: Clio (USD 17.000/USD 23.000) – 208 (USD 16.000/USD 22.000)
Versiones extremas: Clio RS (USD 33.000/200 CV) – 208 GTI (30.000(200 CV)
Gama potencias: Clio (75 CV a 120 CV nafta y 75 CV a 90 CV diesel) – 208 (68 CV a 120 CV nafta y 92 CV a 115 CV diesel)
Pesos: Clio (980 kg) – 208 (1100 kg)
Pero, además de las -previsibles- similitudes entre estos competidores de segmento, otra sub-batalla se libra en el mundo prestacional, en el de la adrenalina, de los 200 caballos y puesta a punto deportiva. Si en el mundo Clio buceamos hacia atrás, nos encontramos con el Clio Williams, modelo que cosechó suspiros por doquier en todo el mundo y en particular en Argentina donde se comercializó tiempo atrás.
Luego, de la mano de la 2ª generación, llegaría el espectacular V6 con sus 230/255 CV, pero, a pesar de tanta bestialidad, y una gordura estética llamativa, no tuvo el impacto del Williams. Llegarían luego los Clio RS con diferentes configuraciones, hasta el actual que nos ocupa en esta nota.
Si miramos la historia de Peugeot, tenemos, tanto en 206 como en 207, las versiones RC de poco menos de 180 CV. Si bien no estaban tan lejos de las RS del Clio, no tuvieron la espectacularidad de su rival. Podríamos ir más atrás y rescatar el impresionante 206 T16, con 200 CV en su versión de calle (200 unidades necesarias para homologar el del Grupo B) pero con una estética realmente amezante. Ahora, con las últimas presentaciones de ambas automotrices francesas, la guerra prestacional está más vigente y caliente que nunca.Ambos equipan motores 1.6 de 200 CV, caja de 6 velocidades (automatizada de doble embrague en el Clio) y pesan 1200 kg. En cuanto a prestaciones, Peugeot anuncia 230 km/h de velocidad máxima y una aceleración de 0 a 100 km/h en 6.8 segundos. Valores similares al del modelo extremo de Renault. Ambos, también, estuvieron en el reciente Salón del Automóvil de Buenos Aires y ambos, para terminar la comparación, llegarán a nuestro país, en una pelea de fondo que casi no tiene antecedentes entre las francesas, ya que Clio Williams y Sport estuvieron en Argentina, lo mismo que 207 RC, aunque casi no se miraron de reojo.
Clio RS y 208 GTI. Renault y Peugeot. Lindos, deportivos, prestacionales, deseados.
