A mediados de 2020, mostrábamos el Mercedes-Benz CLA, algo así como «el sedán» de Clase A. Estrictamente no sé si lo es, aunque tampoco un «coupé de 4 puertas» como erróneamente solemos llamar a estos modelos (uno de los iniciadores modernos, su pariente, el CLS). Recordemos que Clase A nació en 1997 (se vendió en Argentina), con nuevas generaciones en 2005 (no llegó aquí), 2012 y 2018, la última vigente que se vende en Argentina. En la primavera del año pasado mostrábamos el concept que adelantaba la siguiente generación del CLA.

En aquella oportunidad se hablaba de solo versiones eléctricas (EV), aunque ahora, a partir del «parate» que viven los modelos a batería, largamente comentado, se agregan versiones híbridas. La plataforma MMA (Mercedes Modular Architecture) permite también estas variantes. El dato curioso, o no tanto, es que nuevamente tendrá motores Renault. ¿Cómo? Bueno, aclaremos. El anterior Clase A contaba con motores diesel 1.5 de la marca francesa (hoy reemplazado por el 2.0 propio) y el 1.3 TCe (lo probamos en Duster Iconic entre otros) que, aunque se presenta como un desarrollo en conjunto, lo cierto es que más allá de algún aporte alemán, básicamente es un motor Renault.

Y ahora, los motores «híbridos» no serán alemanes ni chinos de origen Mercedes-Benz, sino que serán provistos por Horse Powertrain, una empresa creada por Renault, con participación de la china Geely entre otras. Por lo tanto, aunque quizás en grado algo menor, los motores térmicos, base de las versiones híbridas del próximo Mercedes CLA serán Renault, digamos. Hablamos de un 2.0 de ciclo Miller y un 1.5 turbo también Miller; este último con el agregado de un motor eléctrico de equivalentes 27 CV, sumados a 136 CV, 163 CV o 190 CV según el caso. El eléctrico tendrá arquitectura de 800 V, una autonomía de 750 km, 272 CV con tracción trasera y 380 CV en configuración AWD.