Inteligentemente, y sobre todo a partir de su Renaulution, la marca francesa viene reflotando nombres icónicos, nostálgicos, de gran carga afectiva para la industria automotriz. Además de los esperados R5 y R4 eléctricos (en ese orden), en 2024 y 2025, Renault decidió presentar la Espace de nueva generación, ahora SUV, lejos de su histórico formato monovolumen, y algo similar ocurrirá con Scenic, inédito modelo (para el segmento) con base Megane, nacido en 1996, prácticamente de manera contemporánea con aquel, incluso utilizando en algunos mercados ambos nombres contiguos.
Tomando algunos elementos de aquel concept Scenic Vision de 2022, eléctrica con pila de combustible (hidrógeno como fuente), la nueva Scenic será eléctrica, claro, ya no monovolumen, sino un mix entre crossover y SUV, definición personal y subjetiva. El año pasado mostrábamos una recreación acerca de su posible aspecto, basada en aquel concept y en fotos tomadas a unidades de prueba, camufladas. La nueva Scenic llegará en 2024 al mercado europeo, y al igual que el Vision, tendrá una longitud de unos 4.5 metros, unos 10 cm superior a la de la última Scenic con motores térmicos (que hasta el año pasado se vendió como Grand Scenic). Plataforma CMF-EV para eléctricos de Groupe Renault.
Tendrá dos configuraciones de batería, con autonomías de hasta 500 km, más que interesante y eficiente valor para la mayoría de los trayectos urbanos y semi urbanos. Dos opciones de potencia; 150 CV y 220 CV, heredados de sus hermanos eléctricos E-Tech. Renault Scenic no será un «hijo único»; derivará, al menos, en un modelo Mitsubishi, y tal vez, más adelante en un Dacia, con las lógicas modificaciones para mostrarla algo más austera. No se descarta una variante by Alpine, obviamente, teniendo en cuenta que Megane E-Tech la tendrá, y R5 también. Aunque Scenic nueva generación tendrá poco y nada a nivel conceptual, de sus ancestros, recuperará un nombre importante para Renault. Veremos su aspecto final cuando se presente, seguramente a finales de este 2023.