Aunque es un término más bien asociado al mundo de los smartphones, bien podríamos usarlo en este caso. En definitiva, lo que Fiat está probando es la carga wireless para sus eléctricos. Utilizando un término más técnico, se trata de la carga por inducción, sin cables, lo que implicaría un enorme avance para el funcionamiento de los eléctricos, cuyo desarrollo definitivamente está terminando de sepultar a los motores a combustión, mucho antes de lo previsto, nos guste o no. En una pista de prueba especialmente construida, la marca italiana reproduce lo que sucederá en las autopistas del futuro.
Sin cables a la vista, debajo del asfalto existen bobinas de cable que se encargan de «emitir» la electricidad que tomará la batería del eléctrico al circular por la misma. Sí claro, estamos hablando de una fuerte inversión para transformar la red vial actual en un sistema apto para tal función. Seguramente no se dará en todas las calles sino en algunas autopistas principales. Claro, las ventajas son casi inimaginables. Un auto podría prescindir de la carga y sus tiempos e inconvenientes. No es poco. Las instalaciones de Fiat se conocen como Arena del Futuro, y están especialmente diseñadas para probar la carga de baterías por inducción mientras se circula. Avances de la tecnología.