La actual 5a generación del Audi A4 (B9) fue presentada en 2015, y renovada ligeramente en 2019: tiempo más que suficiente para una nueva generación, la que será la última en contar con motores a combustión, además de una variante eléctrica, inevitable e ineludible en estos tiempos. El modelo nació en 1995 (B5) casi como un desprendimiento del VW Passat, sucediendo al Audi 80. Personalmente creo que esa primera generación de mediados de los 90´ s fue la más atractiva, subjetividad mediante.
Audi no suele aplicar drásticos cambios en la estética de sus modelos (tampoco en las motorizaciones) con cada renovación, sino más bien cambios sutiles, más superficiales, y es su marca registrada, a la que adhiero totalmente (una características de las alemanas en general). Esta nueva generación B10 no será la excepción, y por lo tanto tendremos un A4, en cierto sentido, continuista con el actual. Cambios en ópticas, en parrilla y en paragolpes, pero sin drásticas modificaciones. Lo mismo para la parte posterior, con la probable incorporación de un LED entre ópticas, tan de moda. Nuevas llantas, obviamente, y sí grandes cambios en el interior, mudando hacia lo visto los nuevos eléctricos de Audi, como el e-tron GT.
Contará con 2 plataformas. La variante eléctrica (primera en la historia del A4) se basará en la conocida PPE, pasando a llamarse probablemente A4 e-tron. Los nafteros y diesel, en la actual MLB, sin cambios en las opciones mecánicas actuales. Sí llegaría un RS4 híbrido, combinando ambos mundos, y con una potencia que podría llegar a los 650 CV. También habrá versiones microhíbridas con batería de 48 V e híbridas enchufables (¿365 CV?), otro hecho inédito en su historia, imposible de obviar. Veremos qué nos muestra Audi para la próxima generación del exitoso A4.