Aunque ambos modelos tienen bastantes diferencias, el nuevo «C4 sedán» tendrá la misión de reemplazar a ambos, de acuerdo a cada mercado. C4 es un modelo europeo, hatchback, nacido en 2004 como sucesor del Xsara, y que derivó en el tricuerpo C-Triomphe, para el mercado chino, que también llegó a nuestro país, además del C4 5 puertas original, algo más tarde. En 2004 llegaría la segunda generación, que ya no se vendió en Argentina, pero que indirectamente llegó a través del C4 Lounge, que Citroën sigue vendiendo aunque ya no forma parte de la pata industrial de la ex PSA en Argentina. A mediados del año pasado, finalmente, se presentó la nueva (3a) generación del C4, con un diseño absolutamente rompedor y polémico.
Por otro lado, C-Elyseé, nacido para mercados emergentes en 2013, si bien se produjo y vendió en Europa, junto con su gemelo Peugeot 301, derivados de 208/C3. Aunque ya no se venden, sí lo hicieron en Argentina, importados desde España, con buen éxito comercial. Lo probé en su momento, y me dejó una excelente impresión, tanto en versión naftera como en la muy austera diesel. Aunque C4 Lounge estaba posicionado por encima de C Elysée, ambos conformaban una interesante dupla en nuestro mercado. Lo cierto es que Citroën está trabajando (a nivel global) en un sucesor de ambos, sobre la base del nuevo C4 3a generación, algo lejos del concepto low cost de C Elysée.
El nuevo C4 L mantendrá la plataforma del 5 puertas, incorporando un tercer volumen, más cercano al mundo fastback, pero diferenciándose del C4 original. Se supone mantendrá las motorizaciones Puretch 1.2 de 100 CV, 120 CV y 155 CV, además de los eficientes diesel, todavía vigentes, 1.5 de 110 CV y 130 CV. También habrá una variante totalmente eléctrica derivada del e:C4 con 136 CV como sus primos franceses. Será producido en España hacia mediados de 2022, llegando a los distintos mercados ya en 2023. ¿Resulta raro que Citroën desarrolle un sedán en estos tiempos de muerte avanzada de los formatos tradicionales? Bueno, no es exactamente un tricuerpo, para comenzar, y además, en algunas regiones asiáticas, europeas (del este) y en LATAM hay vida aún para este tipo de vehículos, más allá del imparable avance de pick ups y SUVs. ¿Llegará a Argentina? Para nada me animo a descartarlo.