Hagamos un poquito de historia, no viene mal. Y varias notas previas, todas en febrero. En ese mes, en 2018, mostrábamos el nuevo Peugeot 508 con un diseño muy deportivo y atractivo, en partes iguales. Un año después comenzábamos a especular con una nueva versión deportiva (inédita en la historia del modelo) híbrida y con más de 300 CV. Finalmente, un año después, en febrero de este convulsionado 2020 mostrábamos la versión de producción (casi sin cambios respecto al concept original), y finalmente, en esta ocasión estamos presentando el inicio comercial del modelo, cuyas ventas comenzarán en octubre.
Disponible tanto en versión sedán como en rural, conserva las especificaciones técnicas comentadas en aquellas notas. Motor naftero 1.6 Puretech (ex THP) de 200 CV en combinación con un motor eléctrico de equivalentes 110 CV, ambos vinculados al eje delantero. Agrega un segundo motor eléctrico de 113 CV, al eje trasero, con lo que consigue una potencia combinada total de 360 CV y, digamos, tracción integral. Torque de 520 Nm. Caja automática de 8 relaciones, la conocida EAT8, disponible en otros modelos como el Peugeot 3008 o el DS 7 Crossback, ambos probados desde estas páginas. Autonomía en modo eléctrico de modestos 42 km, aunque suficientes para movimientos dentro de ciudades. Batería de 11,5 kWh. Amortiguadores adaptativos con 3 modos elegibles: Confort, Hybrid y Sport. Aceleración de 0 a 100 km/h en sorprendentes (o no tanto) 5.2 segundos. Neumáticos Michelin Pilot Sport 245/35R20.
Estéticamente, y partiendo de una silueta de por sí deportiva del 508, no presenta grandes modificaciones, pero sí las suficientes, quizás, para darle un toque distinto, acorde con sus prestaciones y posicionamiento. Parrilla y paragolpes específicos, con insertos en verde flúo, spoilers y deflectores en ambos extremos, faldones laterales y la nueva insignia de estos deportivos PSE de Peugeot, que vienen «a reemplazar» a los históricos GTI, si bien no hay que llenarles planilla de defunción aún. Tres barras verticales en verde, simulando las garras de un felino, representando toda una puesta a punto deportiva y más ecológica. Aunque el Peugeot 508 estaría confirmado para nuestro país, resulta casi descartada esta prestacional versión, aunque, en este convulsionado mundo que nos toca vivir (mundial y sobre todo local), resulta cada vez más arriesgado aventurar pronósticos acerca de llegada de modelos.