Mercedes-Benz Clase E. Uno de los modelos más populares (aunque cueste creerlo, sobre todo en mercados como el nuestro) de la marca alemana, y de mayor prestigio. Claro, acá se ven más Clase A y C, sus hermanos menores, pero en muchos mercados, Clase E toma un fuerte protagonismo. Hace casi un año presentábamos la nueva generación de Clase E, y unos meses después anticipábamos la variante Estate (rural), probablemente más esperada que el sedán, al menos en Europa. Con Cabrio a la espera de la inminente renovación, llega el turno de presenta el nuevo Clase E Coupé, con el nuevo design de la familia.
Respecto al coupé actual, crece -nada despreciables- 12 cm, llegando a los 4.83 m de longitud. Se presenta con 4 motores en la etapa inicial de comercialización: diesel E220d (nuevo motor), con 2 litros y 194 CV, y consumos miserables. De todos modos consigue una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 7.4 segundos. Y los nafteros E200, con el motor 2 litros BlueEfficiency y 184 CV, E300, también 2 litros pero con 245 CV (comparte motor con el C300 Coupé que Mercedes-Benz comercializa en Argentina) y E400, con el V6 de 3 litros y 333 CV.
Como era de esperar, alto nivel en equipamiento de confort y más aún de seguridad. Destacan iluminación LED Mutibeam, Magic Vision Control («sapito» incorporado a las escobillas limpiaparabrisas). Suspension Direct Control, múltiples Airbags (incluso de «cadera»), Dynamic Control, Dynamic Select (con 5 programas de seteo en la respuesta dinámica), Estacionamiento remoto (desde afuera del auto…), y bastante más.
Estéticamente, como ocurrió con su hermano sedán, se acerca a la filosofía del Clase S, tanto en lo que hace al exterior como al interior. Su diseño puede catalogarse como «continuista» respecto al actual, aunque se muestra superador. Frontal con ópticas de menor tamaño y diseño más clásico, y con mayor protagonismo del sector de los «bajos» del paragolpes. Atrás se muestra bastante más «rompedor», con ópticas finas y alargadas (nos recuerdan al GLE Coupé), trazos bastante más limpios, sin «cambios de volumen» ni aditamentos, y un aspecto más macizo y deportivo, menos señorial.
El perfil es -claramente- el sector más «continuista», aunque ha eliminado las «excesivas» molduras del Coupé actual. Ambos voladizos son levemente más generosos, y las manijas de puertas son de nuevo diseño, más sobrias. Finalmente, línea de cintura «menos curva» que el actual. En el interior, cambios totales, que no nos terminan de convencer (al menos en cuanto a imágenes se refiere). Más refinado, sí, aunque con un diseño «muy tablet» que nos recuerda (salvando las grandes distancias) a algunos Cadillacs y Buicks de los 80´s y 90´s. Definitivamente nos gusta más el diseño convencional del actual. Sí, agradable resolución de la consola central y nuevas salidas de aire circulares, tipo náutica, como en Clase S. Ha ganado en refinamiento, claro, pero creo, ha perdido en clasicismo, tal vez demasiado. Pero se trata de una subjetiva cuestión de gustos, solo eso. El tablero digital es configurable con 3 estilos.
A la espera de un probable E500 coupé y un (menos probable) posterior Mercedes-AMG E Coupé, el E400 coupé se convierte en la versión más prestacional. Además, disponible la línea AMG Line, con alguna personalización deportiva/estética. Su altura es 15 mm menor que la del sedán.
Mercedes-Benz Clase E coupé en Argentina
Sin dudas llegará aunque, resulta poco probable que lo haga en el transcurso de este 2017 que ya tenemos encima. Tal vez hacia el cierre del año, aunque, más seguro, comenzando 2018. Hoy, Mercedes-Benz no comercializa en nuestro país Clase E sedán, a la espera de la nueva generación.
