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Nuevo Jaguar E-Pace, hermano menor del F-Pace


Jaguar. Junto con Land Rover, ambas británicas, propiedad del grupo indio Tata, situación que solo puede adivinarse «papeles en mano»; por el contrario, contemplando sus portfolios, más británicos, refinados y tecnológicos que nunca, parecerían ser parte de un conglomerado alemán/británico.


Las tendencias marcan tendencias. Y casi ninguna automotriz ha podido resistir a la moda de crossovers y SUVs, salvo Ferrari, aunque, si bien la casa de Maranello siempre negó dicha posibilidad, todo parece indicar que en breve podría desembarcar su primer SUV deportivo. Jaguar lanzó F-Pace en 2016, con singular éxito, y esto tuvo que ver con la decisión de crear un hermano menor, el E-Pace que estamos presentando.


En Argentina, Ditecar, importador y distribuidor, vende el F-Pace (y el resto de la gama Jaguar) y ya está mostrando en su página web al nuevo E-Pace, señal inequívoca que desembarcará en nuestro país, seguramente ya en 2018. El Jaguar E-Pace cuenta con una longitud de 4.39 m, bastante por debajo del F-Pace, que mide 4.75 m. ¿A quienes apunta Jaguar con el E-Pace? A varios, entre ellos a Mercedes-Benz GLA (4.42 m), Audi Q3 (4.39 m) y BMW X1 (4.44 m). Todos ellos arrancan en los USD 35,000 en Europa, unos verdes menos que el Jaguar. Algo lejos queda el Porsche Macan, con 4.70 m y precios desde USD 70,000, competencia del hermano mayor de E-Pace. Range Rover Evoque, pariente cercano, también se ubica en los 4.37 m, aunque con un diseño diferenciado, más SUV.


Estéticamente, el nuevo Jaguar E-Pace adopta un diseño más deportivo que F-Pace, más gordo, más «Porsche Macan», con un frontal distinto que se asemeja al deportivo F-Type, con una parrilla «convencional» de gran protagonismo, y un entramado que repite en sector de -inexistentes- antinieblas y «bajos de paragolpes». Muy limpio, sin estridencias, y a la vez, personal. Atrás sí, toma los rasgos de su hermano mayor, con ópticas de tamaño pequeño (haciendo honor a la historia británica), luneta de gran inclinación (uno de los aspectos que lo muestran deportivo), y grandes salidas de escape. Nos recuerda a su primo político Evoque.


En el perfil, encontramos, tal vez, su lado más musculoso
, con una cintura alta y «poco vidrio». Algún aire a Alfa Romeo Stelvio, lejano, en esta manía de encontrar parecidos. Cortos voladizos delantero y trasero y buen despeje al suelo. Generosas llantas de 21″, muy elegantes y una luneta que, desde el perfil, se aprecia exageradamente inclinada. Alerón de gran tamaño que genera un contrapunto estético con la luneta.


El interior es elegante, algo inevitable en un modelo de origen inglés. De todos modos, sin descuidar su histórico refinamiento, han ido evolucionando, adoptando modernidad en su dosis justa, algo que también puede observarse en los últimos Land Rover y Aston Martin.

Pantalla integrada de 10″, el negro dominando la escena, con iluminación ambiental difusa, toque premium, volante deportivo con mandos remotos y costuras en butacas -de exquisito cuero-, volante, tablero y contrapuertas. Sobrio y sencillo. Muy atractivo.


Mecánicamente, recurre a los motores Ingenium
, tanto diesel como nafteros, todos de 2 litros de cilindrada. Entre los primeros, 150 CV, 180 CV y 210 CV, y nafteros de 249 CV y 300 CV, motor con el que alcanza los 100 km/h en solo 6.4 segundos, valor interesante para un SUV, si bien de características más deportivas. Caja automática de 9 o manual de 6. Gama de precios entre USD 40,000 y USD 77,000.


En cuanto al equipamiento, un detalle interesante aparece con el Activity Key; una pulsera a prueba de agua, que permite dejar la llave en el interior y llevar el brazalate como una segunda llave, por ejemplo, si quisiéramos surfear y no estar preocupados donde dejamos la llave. Interesante y novedoso. El Jaguar Driving Control permite setear la respuesta mecánica entre 4 modos: Normal, Eco, Dynamic e Invierno. El Adaptative Dynamics modifica la respuesta de los amortiguadores, electrónicamente controlados. Jaguar ofrece el Driver Assistance Pack que agrupa Control de Crucero Adaptativo, Frenado de Emergencia a Alta Velocidad, Asistente Angulo Muerto, Control de Tráfico Cruzado Trasero, Asistente Mantenimiento de Carril, Monitoreo del Estado del Conductor, y más. Completo.


El nuevo Jaguar E-Pace debería arribar a Argentina en 2018, quizás a durante el primer semestre. Ojalá.

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