Renault Clio. Poco para agregar a su rica historia, historia que comenzó en 1990, con la difícil misión de reemplazar a otro histórico, el Renault 5 (supercinco en realidad). Y llegó a nuestro país muy poco después, importado, causando sensación. Y como no recordar al Clio Williams de esa primera generación, inolvidable. En 1998 llegaría la segunda, que también se vendió aquí y que tuvo en la versión V6 un espectacular desarrollo -casi- de carreras. Hasta acá llegó la fabricación regional (en cuanto a generaciones), primero con el restyling europeo y luego con el Clio Mio que se fabricó en Argentina hasta fines de 2016, para ser reemplazado por el Kwid.
Europa tuvo en 2005 su tercera generación y en 2012 la cuarta, ambas con restylings a mitad de sus ciclos comerciales. A esta sí la tuvimos brevemente en Argentina ya que Renault la mostró en el Salón de Buenos Aires y mantuvo algunas unidades traídas de Francia durante un tiempo, con la idea de su incorporación al mercado local, algo que nunca ocurrió. Un diseño «más monovolumen». Y la muy famosa versión RS tuvo su despedida de la generación actual con el Clio RS18, homenaje a la F1, hace un año. Hasta acá la historia. Vamos al futuro, casi presente.
Si bien será presentado oficialmente en el Salón de Ginebra, en marzo, Renault adelanta fotos oficiales del nuevo Renault Clio 2020, que llegará los concesionarios europeos a mediados de este año. Clio es muy importante en el viejo continente, casi todos los años repite el liderazgo del segmento y es uno de los modelos más vendidos en el ranking global.
La primera impresión al mirar al nuevo Clio es que se trata solo de un ligero restyling, y a pesar de no contar aún con suficiente información, Renault asegura que es un auto totalmente nuevo.
Como era de esperar, adopta el nuevo frontal de la marca, ya visto en Megane por ejemplo, con las luces con diseño tipo «coma», consiguiendo un aspecto deportivo y agresivo. Enorme rombo y un resultado general sobrio, limpio. Y conceptualmente, mantiene el estilo del actual. Atrás ocurre lo mismo, con nuevas ópticas y paragolpes, pero un diseño continuista (¿para que cambiar algo que es exitoso?). En el perfil encontramos este respeto por el diseño del actual, verificando leves diferencias, y podríamos hablar de un «repaso» general. No nos gustan las manijas traseras embutidas, en ningún caso, y este no es la excepción.
Adentro sí, cambios totales, radicales, absolutos. Y no podemos evaluar diferencias en la comparación ya que el interior ha «nacido» de nuevo. En general nos gusta, con una mejora en la calidad percibida, salidas de aire rectangulares en lugar de las redondas, comandos de climatización más «ortodoxos», y un nuevo tablero, digital, para estar a tono con lo que muestra la industria hoy. Muy atractivo y elegante. Solo criticamos la pantalla táctil central, creemos desproporcionada, al estilo «Tesla», seguramente muy práctica pero muy poco «estética».
Algunos de los pocos datos disponibles. Su longitud se ve reducida en 14 mm, llegando a los 4.05 m. Y además, es 3 cm más bajo, consiguiendo un aspecto más deportivo y menos «monovolumen». Estrena la nueva plataforma CMF-B, del grupo, ya vista en el Nissan March/Micra, dicho sea de paso, modelo con un aspecto general muy similar a este nuevo Clio. Una novedad importante es que adoptará la micro hibridación (E-Teach), con batería de 48 V y algunos sistemas movidos por electricidad. Desaparecerán las variantes GT Line (aspecto deportivo, manteniendo las motorizaciones «normales»), que pasarán a llamarse RS Line, como opción intermedia al próximo Clio RS.
Nuevo Renault Clio 2020. Con 15 millones de unidades vendidas, no se trata de una renovación más, sino de uno de los compactos urbanos más importantes del mercado europeo. ¿Descartado para Argentina? Difícil saberlo. Hoy Renault tiene el Kwid (otro segmento), pasa por Sandero (low cost) y llega a Fluence (por ahora), no teniendo representantes en este segmento. Pero, teniendo en cuenta que tampoco los tiene en el segmento del Megane (IV), esperamos se decida a fabricar regionalmente el exitoso mediano, aunque Clio no llegara. Resulta claro que alguno de los 2 deberá comenzar a vender la francesa, sobre todo a partir de la definición de un alto ejecutivo, respecto a que «ya no habrá más Dacia con logo Renault». Ojalá.
