Hace más de un año comentábamos los planes de KIA respecto a los próximos eléctricos, tras el debut de EV6, EV9 y EV5, estos dos últimos, SUV. Y nos referíamos a los EV3 (número impar, SUV) y EV4, hermano menor del deportivo EV6. Con EV3 ya presentado, ahora llega el EV4, que será presentado de manera oficial mañana, en su debut global para los medios, pero que ya se conocen imágenes (pocas, como suele suceder en estos casos) del modelo final de producción, y en sus dos variantes, corta y larga, 5 y 4 puertas, o, usando términos casi vetustos en la actualidad, hatchback y sedán.

No solo vetustos porque prácticamente nadie utiliza ya aquellos nombres tan usados hasta no hace mucho tiempo, sino también porque si bien podríamos encuadrarlos en esas definiciones históricas, ortodoxas, el hatch se parece más a un SUV, o en todo caso a un crossovover, y el sedan a «algo tipo fastback», pero en todo caso no adquieren las características reales de aquellas carrocerías. Claro, hoy todo pasa por SUV y crossovers, mal que nos pese. KIA viene trabajando tanto en modelos «térmicos», como el K3 que llegará a Argentina en breve (también «corto» y «largo»), sino también en el mundo EV.

Y creo es una de las marcas que mejor ha repartido ambas tecnologías, con un portfolio bastante repartido y diverso, si bien con mayor presencia de modelos con motor a combustión. Esto le permite, contar con productos EV, que a la corta o a la larga serán la opción casi única en el mundo del automóvil (¿lo serán realmente o hay esperanzas para los térmicos?), pero también ofrecer motores de combustión interna e híbridos (conjuntos) para la coyuntura actual, en la que los EV están durmiendo una siesta, solo una siesta. De hecho ya están despertando…