Aunque ya existía desde hacía un par de décadas, a fines de los 60s Hyundai comenzaba a producir automóviles; el primero, bajo licencia Ford. El segundo, y primer desarrollo propio (aunque con aportes externos) fue el Pony, a mediados de los 70s, que nació como un concept coupé, y luego derivó en versiones 5 puertas y rural. Claro, aquellos inicios fueron bastante humildes, muy lejos del esplendor actual del grupo, que está dentro del «top five» (como grupo) de las marcas que más venden automóviles a nivel mundial. No es poco. Aquellos Pony se vendieron en Argentina, con escaso éxito comercial, seguramente ayudado por la desconfianza a esos «nuevos y desconocidos autos» de origen ¿coreano?

Si se desconfiaba de la durabilidad de los japoneses, con lo coreanos la situación era bastante más crónica. Con paciencia asiática, Hyundai supo avanzar, con ritmo quizás lento pero sin detenciones, para llegar a ser hoy uno de los referentes mundiales, no solo en estadísticas de ventas, sino también en diseño, tecnología y calidad. Y el portfolio de la marca es bastante amplio, centrándose en SUVs de diferentes segmentos. Y al cumplirse 45 años del nacimiento del Pony (como Coupé Concept), la marca decidió homenajearlo con este 45 EV, Concept, que muestra hacia donde irá Hyundai en el futuro cercano.

Aunque evoca las formas del Pony, no abusa de la melancolía. Aunque no llegará a producción como tal, este 45 EV muestra los lineamientos futuros de Hyundai, y sus próximos modelos irán adoptando soluciones tanto estéticas como técnicas, vistas en este concept. No hay datos técnicos ni de equipamiento del nuevo modelo. Sí que tiene motorización eléctrica, que sus baterías se alojan debajo del baúl, que muestra un interior muy futurista, dominado por pantallas táctiles, con un absoluto predominio del minimalismo, con tecnologías de comunicación hombre/auto, auto/auto y auto/sistema, y una parafernalia tecnológica. En cuanto al diseño, se muestra muy limpio, despojado, casi aburrido, y con enormes llantas de aleación. De todos modos, si se colocaran manijas en puertas, unas llantas mas convencionales, y algunos retoques más, perfectamente podría pasar a producción. Por ahora, un atractivo ejercicio estético y tecnológico.