Hace unos años probaba el MINI Countryman Cooper S, con motor de 2 litros BMW (reemplazando al anterior THP 1.6), con muy positivas conclusiones; un modelo muy eficiente y divertido de manejar. También había probado el anterior 1.6 THP, y el cambio era radical, profundo, enorme. En 2020 MINI presentaba la actualización de mitad de ciclo, incorporándose a la actualización del resto de la gama. Por otro lado, el año pasado se mostraba al mundo el nuevo concept MINI Aceman, mostrando el camino eléctrico inminente de la marca «germano-británica».
Y este término tiene más sentido que nunca, no solo porque BMW es propietaria de MINI, sino también porque la nueva generación del Countryman, que estamos adelantando, será fabricada en Alemania, en la misma planta que sus primos hermanos X1 y Serie1 y Serie 2, y no en Inglaterra. Esta nueva generación, 3a, tendrá variantes nafteras y diesel, ambas micro híbridas, en detrimento de las híbridas enchufables (PHEV) que desaparecerán de la oferta; algo que viene ocurriendo con varias marcas (última generación con convivencia de ambos sistemas mecánicos) y eléctrica, tal como adelantamos en 2021.
Concretamente la variante eléctrica tendrá potencias de hasta 313 CV, con 2 motores y por lo tanto tracción integral. Esta podría ser la versión Cooper S, la más deportiva. Y con una autonomía de unos 440 km, muy interesante. De acuerdo a las imágenes oficiales provistas por la misma marca, de una unidad camuflada, claro, podemos ver un estilo continuista, que tendrá mucho del concept Aceman también. Otra característica de esta próxima 3a generación, tendencia en varias automotrices, y también en BMW, tiene que ver con que tanto las versiones térmicas como la eléctrica casi no tendrán diferencias estéticas. Por otro lado, crecerá unos 15 cm en longitud, consiguiendo una mayor habitabilidad. Veremos como termina su desarrollo, antes de su presentación oficial, que se daría en 2023.