Hace unos 7 años tomaba contacto con el Fiat Tipo sedán (única variante disponible), en versión 1.6 AT Easy (ver nota). La verdad es que, aunque no era un modelo lujoso ni muy pretensioso, lo considero uno de los mejores Fiat de los últimos tiempos, junto con el Stilo; un modelo con poco y nada para envidiar a competidores más calificados (al menos en los papeles). Fiat lo vende en Europa, pero en volúmenes reducidos. Actualmente solo en versión sedán, aunque hasta hace poco hatch y rural, y la variante «aventurera» Cross (ver nota).
Conozco algunos propietarios del Tipo y están muy conformes con el auto. Claro, la reventa, la depreciación, etc., hacen lo suyo, pero en todo caso no es culpa del modelo. Fiat siempre tuvo inconvenientes para posicionarse en el segmento C (Tipo, Marea, Tempra, etc.), pero esto no es culpa de los modelos en sí (algunos muy buenos) sino de otras cuestiones, propias y ajenas pero no de los modelos en sí mismos. Originalmente estaba previsto que finalizara su producción (Turquía) a fines de este 2025, pero la marca y Tofas (su asociada turca) decidieron prolongar su producción y comercialización hasta el 30 de junio de 2026.
Podemos considerarlo un modelo exitoso, dentro del mundo Fiat y el segmento C, digamos, y sobre todo en Europa del Este. Pero claro, no tiene sentido invertir en un nuevo desarrollo, cuando la marca ya ha mostrado su futuro (presente): la nueva familia Grande Panda (ver nota), la que, además del hatchback original, eléctrico, híbrido y hasta térmico puro, derivará en un sedán/fastback, y un SUV, reemplazantes (en nuestra región) de Argo, Cronos y Pulse en ese orden. Además, contará con una pickup pequeña, relevo de la Strada. No habrá rural, obviamente. Un interesante modelo que se despide en breve.








