El mundo «R» de Volkswagen nació con el Golf IV en 2003, si bien se llamó R32. Continuó en el Golf V (el que no se vendió en Argentina ya que Brasil fabricó el «4.5») y ya en la 6a generación apareció la R «a secas», la que continua en la actualidad, con el Golf 8 rediseñado, y espectaculares 333 CV. La respuesta del mercado fue tan buena que se convirtió en una «marca», o una división independiente, dentro de Volkswagen. Se extendió a otros modelos como el T-ROC por ejemplo, y también a la Tiguan, ya en la generación anterior, post restyling.
Ahora, con la nueva generación Tiguan, la tercera, la marca pone a punto su variante más prestacional. Hay que recordar que la versión norteamericana difiere un poco de la europea (pero ambas basadas en la china Tayron en la variante Allspace). Y en aquel mercado, Volkswagen presentó una variante más potente (no disponible en Europa), bautizada Tiguan SEL Turbo, con nada despreciables 270 CV. Por lo tanto no está claro si la próxima R llegará a los Estados Unidos. Sí estará disponible en Europa, su principal mercado. No se esperan aumentos de potencia con lo que mantendrá el motor 2.0 TSI con 320 CV o quizás 333 CV para alguna edición especial.
Caja DCT (doble embrague) y tracción 4Motion. Volkswagen anunció hace un tiempo que su marca deportiva R sería solo eléctrica a partir de 2030, algo que, como tantas otros anuncios y predicciones de diferentes automotrices, me permito poner en duda a partir de la realidad actual del auto eléctrico, si bien están repuntando las ventas en todo el mundo; ni hablar en China. Visualmente, como todos los R, será sobria, con modificaciones que la harán «visible», sobre todo por su color azul, pero manteniendo cierta ortodoxia en diseño; lo que esperan los clientes R. En Argentina, Volkswagen no ha vendido modelo R alguno, pero es algo que podría cambiar en el futuro, veremos.










