Hace exactamente 4 años, BMW presentaba el nuevo M5, con la opción Competition, llegando a 600 CV y 625 CV respectivamente. Todavía sin el aporte de la hibridación. Números espectaculares, pero que se quedan lejos de los del recientemente presentado M5 2025, ahora híbrido, con tracción integral (pero con opciones) y espectaculares 727 caballos. Cuando tenemos en cuenta que el primer M5, el de 1984, (el primer M de BMW) tenía «solo» 286 CV, nos «corre un frío por la espalda». La potencia se ha multiplicado por un poco más de 2.5 veces, lo cual es casi inverosímil. Claro, las prestaciones no han mejorado en igual magnitud, ya que aquel tenía un peso de 1,500 kg, y por lo tanto una relación peso/potencia de 5.24 kg/CV (cuanto más baja mejor) , con lo cual «cada caballo debía mover poco más de 5 kg».
En el nuevo que se acaba de presentar, a pesar de su altísima potencia, la relación baja a 3.37 kg/CV, con lo cual, con un aumento en la potencia de 1.5 veces (diferencia), el peso también lo ha hecho (2,500 kg vs 1,500 kg). De todos modos, acelera de 0 a 100 km/h en 3.4 segundos. Nada mal, ¿no? Aún así, a pesar del gran aumento de potencia respecto al actual (727 CV vs 600 CV), por el comentado aumento de peso, la aceleración es 2/10 más lenta que el actual; de todos modos, impresionante. El motor sigue siendo el eterno y muy eficiente V8 de 4.4 litros de 570 CV, con el aporte de la electrificación, agregando 194 CV, totalizando 727 CV (la suma no es lineal en estos casos). Respecto al anterior (o actual, ya que este nuevo M5 se presentará a mediados de año), ha ganado casi 500 kg en la balanza, y esto explica la no linealidad en la relación «aumento de potencia vs tiempos de aceleración». De todos modos, de por sí no hay relación lineal entre tiempos de aceleración y potencia o peso.
Igual, nada mal, ¿no? La ventaja viene, en todo caso, además de menores emisiones, por un consumo probablemente menor; no declarado, pero quizás el balance así termine. Estéticamente toma los rasgos del nuevo Serie 5, recientemente presentado, con mayor agresividad, claro, pero no tanta; hablamos de alemanes, casi siempre sobrios, o en todo caso más que otros europeos, si bien han ido perdiendo esa ¿virtud o defecto?, y sobre todo Mercedes-Benz, quizás la más audaz en términos de diseño de las 3 alemanas premium. El nuevo M5 se presentará oficialmente en julio y tendrá un precio que rondará los USD 120,000. Completando la parte mecánica, su tracción es integral, aunque puede transferirse mayor aporte a las ruedas traseras, incluso un 100% (no apto para no expertos). En modo eléctrico podrá recorrer 40 km, un dato irrelevante en el modelo.
Sus neumáticos serán 285/40R20 adelante y 295/35R21 atrás. Enormes. En opción, frenos carbocerámicos, y la caja es la Steptronic de 8 relaciones. Estéticamente toma la base del renovado Serie 5, como era de esperar, con una puesta a punto visual más deportiva, sin exagerar, como es habitual en los M de BMW. Adelante, paragolpes, parrilla (de tramado algo rebuscado), y atrás paragolpes y las enormes 4 salidas de escape. Nuevas llantas, claro y en el interior solo una puesta a punto visual para mostrar que se trata de un M. Un modelo agresivo, creo bastante más que los anteriores, y me gusta más la parte delantera que la trasera, pero es algo subjetivo, claro. BMW M5 se vende en Argentina y por lo tanto debería llegar también la nueva generación, aunque creo recién entrado 2025. Lo esperamos.
