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¿Volverá el V8 HEMI a Dodge, ahora sin Tavares?

Extinto Dodge Challenger SRT

Bueno, varias aclaraciones iniciales respecto al título de esta nota. Por un lado es sabido, o al menos así lo perciben los norteamericanos y los concesionarios de las marcas del grupo Stellantis en ese país, que aunque no fue una decisión solamente personal del ahora ex CEO Carlos Tavares, sí tuvo mucho que ver en la desaparición casi por completo del icónico motor V8 HEMI (con distintas cilindradas) en varios modelos del grupo. Casi, porque todavía está presente en RAM (pero inminentemente desplazado por el nuevo Hurricane Six), en el Dodge Durango y en el Jeep Wrangler 392, que también está transitando sus últimos días.

Nuevo Dodge Charger, 2 puertas, y eléctrico y naftero
Nuevo Dodge Charger, 2 puertas, y eléctrico y naftero

Seguramente similar sensación a la que tuvimos los argentinos cuando dejó de fabricarse el Falcon, el 504, el R12, por nombrar algunos inolvidables que dejaron su marca. Por otro lado, cuando hablamos de «volver a Dodge», nos referimos a sus deportivos. No a Challenger porque no tendrá sucesor, tal cual adelantamos hace tiempo, o mejor dicho será el nuevo Charger, modelo que nació con la idea de ser mayoritariamente eléctrico (en ventas) pero que también se pensó con el naftero Hurricane de 3 litros, versiones que comenzarán a venderse en breve. Lo cierto es que la partida de Tavares (con un final quizás poco agradecido hacia su gestión) alimentó a los norteamericanos la esperanza de un reingreso de motores nafteros, sobre todo el HEMI para algunos modelos.

Dodge Charger. El icónico padre

Y realmente sueñan con un Charger (que es como un Challenger/Charger moderno) Hellcat; algo imposible por lo menos por ahora. ¿Porqué? Sencillamente porque no entra en el vano motor del nuevo Charger, tan simple y determinante como eso. Entonces, las chances pasarían, o por dejar parte del motor afuera del capot, como en su abuelo, algo imposible hoy, o desarrollar un nuevo modelo con volumen suficiente, o (queda una), rediseñar el HEMI haciéndolo más pequeño, ambas también (casi) totalmente inviables. Por lo tanto, por más esperanzas que deje la partida de Tavares, no hay razones fundadas para soñar con un Charger V8. De todos modos el Hurricane 6 no será precisamente aburrido…

Dodge Challenger Hellcat Redeye, 808 caballitos…

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