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Comentarios (1) Pruebas y Contactos

Probamos Citroën DS4. Un verdadero Diferent Spirit

Quizás podría pensarse (y en cierto modo me ocurrió) que DS4 es la «evolución natural» de DS3, siendo el segundo miembro de la familia «Diferent Spirit» en aparecer, y un escalón por encima del auto campeón mundial de rally. Y la verdad es que es un preconcepto muy alejado de la realidad.

No estamos diciendo que no sea una muy buena opción en el mercado automotor, y de hecho lo es; simplemente quiero expresar que conceptualmente es bastante distinto a aquel DS3 que probamos poco tiempo atrás en Automotiva. Si aquel tenía a «la deportividad» como definición más pura de su carácter, DS4 está asociado a confort de marcha y calidad, no tanto a la adrenalina deportiva.

Comencemos por el Diseño. Siempre expresé que había un factor -subjetivo y relativo- estético que hacía que me sedujera más DS3 que DS4, y es que aquel, aun compartiendo plataforma con el C3 (el nuevo que acaba de llegar al Mercosur), se lo veía muy distinto, con alta personalidad propia. Este DS que acabamos de probar deriva del C4 europeo, y la similitud estética es alta, de la mitad hacia adelante. ¿Es esto malo «per sé», criticable?, ¿le juega en contra? Claro que no, simplemente se trata de un análisis muy fino que inevitablemente uno hace en su inconsciente. Nada más.

Dejando aquello de lado, debo reconocer que me sorprendió «la respuesta de la gente» respecto al diseño del DS4. Porque si bien es agradable, deportivo y señorial al mismo tiempo, descubrí que a la gente le gusta mucho y es un objeto de deseo, claramente. La original resolución de sus 3/4 traseros, influída por la ausencia de manijas visibles en puertas traseras le dan un toque especial, distinto. A pesar de su despeje mas bien alto, el DS4 luce «bien plantado», con un voladizo trasero muy corto, llantas deportivas grises muy originales y algunos cromados que resaltan su silueta. De todos modos, en la cola está su mejor sector, muy personal, altamente atractivo. Cuenta con dos pequeños «huecos» cromados que dan la sensación de un escape doble, y recuerdan al 308 nacional.


Puertas adentro
, la cuestión es absolutamente superior, tanto en diseño como en calidad constructiva. Salvo el accionamiento de balizas (muy pequeño), algo menor, y la ausencia de navegador satelital, todo es elogiable.

Consola central ancha con mandos del audio (de lo mejor, en calidad y comodidad) y climatizador automático bi-zona, muy eficiente, de gran rapidez para enfriar el habitáculo.

El sector de instrumentos es mixto; velocímetro con aguja y digital, cuenta vueltas y combustible digitales, con ausencia de indicador de temperatura del agua, algo bastante en común en la actualidad. Siendo un tema subjetivo y no una crítica, preferimos el instrumental con agujas, como el excelente cuadro de indicadores de su hermano DS3. Elogios también para el audio, con radio CD de excelente recepción de FM, sonido «Denon» muy bueno y total practicidad.

El volante es multifunción, y su aro no es fijo como el del C4 argentino (positivo). Desde el mismo se pueden comandar teléfono, audio, control de velocidad crucero (muy práctico) y una función (que curiosamente se repite en el sector central) que apaga la iluminación del tablero. También puede «medir» el espacio para estacionar entre dos autos, indicándonos si es recomendable intentarlo allí o no. Y a propósito de esto, se puede elegir entre diferentes conbinaciones de colores para velocímetro analógico y los indicadores digitales, desde grises hasta azules y sus derivados.

Con doble regulación de volante, y de altura de butaca (con regulación eléctrica de sector lumbar y masajeador), la posición de manejo es muy buena, confortable, como todo lo relacionado al interior y al andar del DS4. Y hablando de butacas, son de cuero (como todas, calientes en verano) bicolor, muy cómodas y de buena sujeción lateral. La regulación de la inclinación es mediante rueda, mucho más práctica que la leva de su hermano DS3. Apoyabrazos central de genersoso tamaño, pero que complica algunas maniobras y el accionamiento del freno de mano. De todos modos es plegable.

El espacio interior no es tan generoso en las plazas traseras, sobre todo a lo largo. Más amplio que DS3, no llega a destacarse, y si bien la climatización es excelente, las ventanillas traseras fijas (concesión al diseño) le quitan algun punto.

Buena capacidad de baúl, que cuenta con linterna extraíble. Un excelente también para la ergonomía, todo está a mano. Y espejos exteriores de generoso tamaño que permiten compensar una visibilidad natural trasera no tan clara por su luneta de dimensiones contenidas, a pesar de los apoyacabezas «en coma» traseros.

Además cuentan con luces de cortesías que iluminan el piso exterior. El acceso al DS4 es bueno, gracias a la amplia apertura de sus puertas, aunque a las traseras complique un poco la ubicación y formato de las manijas.

El equipamiento es muy interesante. 2 levantavidrios eléctricos (para accionar los únicos dos vidrios móviles), climatizador de 2 vías, espejos eléctricos rebatibles y con indicador de presencia de un auto en ángulo muerto (muy útil), luces diurnas LED (no tan útil en algunas provincias con obligación de luz baja permanente),  parasoles extensibles que permiten tapar parte de su enorme parabrisas, ABS, ESP, Control de tracción, 6 Airbags, ganchos ISOFIX, el elogiado audio by Denon y un sistema original de diferentes alarmas sonoras para olvido de luces, de llave y cinturón colocado. Muy original. Otro aspecto destacable es su poder lumínico con ópticas Xenón y direccionables, sumadas a los antinieblas con función «cornering» que hacen del manejo nocturno un práctica muy segura y relajada. Y también suma practicidad el sensor de estacionamiento (delantero y trasero) mostrando la zona del obstáculo, muy útil.

Vamos a la parte mecánica. El motor es el conocido 1.6 THP que utilizan varios Citroën, Peugeot, Mini y también BMW. Absolutamente elástico, de funcionamiento suave, con 163 CV que, andando, parecen menos, y esto tiene que ver con la caja Tiptronic, automática de 6 relaciones y comando secuencial, más pensada para el confort que la deportividad. Nos gustó mucho en la utilización automática, muy cómoda y de funcionamiento suave. No nos gustó tanto en modo secuencial, algo lenta y brusca, hiland fino. De hecho, el 90% de los 1900 km realizados a bordo del DS4 lo hicimos en modo automatizado.

La puesta a punto mecánica del auto esta muy orientada al confort. Motor, caja, dirección, suspensiones, todo apunta a la relajación, y es un verdadero placer manejar el DS4, tanto en ciudad como en ruta, y también en caminos de tierra, gran confort de marcha. Pero, en este punto, la diferencia con el DS3 es absoluta, aquel parece un caballo desbocado, deseoso de hilvanar curvas complicadas, y lo hace con un aplomo increíble. Este DS4, si bien responde con seguridad en los faldeos de montaña, no encuentra su mejor cara en estos sectores.

¿Se puede doblar exigido en las sierras cordobesas buscando el límite? Por supuesto, y ante cualquier indicio de complicación, el ESP nos resolverá el potencial problema con soltura (es desconectable pero a menos de 50 km/h). Pero insisto, no es el manejo deportivo radicalizado su aspecto más destacado. Sí lo es el absoluto confort de marcha con una gran calidad constructiva, bastante superior a la Mercosur promedio. Su velocidad máxima es cercana a los 210 km/h, acelera de 0 a 100 km/h en menos de 9 segundos y el consumo se ubica algo arriba de los 10 litros/100 km (10 km/l) en ciudad, cuidando el pie derecho. En ruta, a 130 km/h llegamos a unos 11.5 km/l.

El precio de este Citroën DS4 Sport Chic es de $ 211.ooo, con una garantía de 3 años o 100.000 km. ¿Contra quienes compite el DS4? Aunque no parezca, no es fácil encontrarle rivales, pero podríamos citar a Alfa Romeo Giulietta como el principal, pudiendo anexar al trío premium Audi A3, BMW Serie 1 y Mercedes-Benz Clase B, todos con precios similares en versiones de entrada de gama o intermedias.

En pocos casos el precio de un auto es totalmente medible y auditable analizando los diferentes parámetros que lo conforman. En muchos, se paga exclusividad, diseño, prestigio, cuestiones sujetivas. Claramente el DS4 no encuentra en el precio una de sus principales atracciones.

Arribando a las conclusiones finales, este DS4 de Citroën se aleja de la deportividad radical y prestacional de su hermano menor  -DS3- apuntando al confort (de habitáculo y de marcha) como el principal atributo, y en esa dirección apuntan la caja Tiptronic, la puesta a punto de suspensiones y la extrema suavidad de su mecánica.

Si se busca diversión al volante, la elección es DS3, que por $ 30.000 menos asegura adrenalina y sentirnos Seb por un rato. Pero, si se privilegia un diseño exquisito, trabajado, muy buena calidad constructiva y un andar totalmente confortable, y un perfil (social) más bien alto, claramente el DS4 es la elección apropiada.

Una Respuesta a Probamos Citroën DS4. Un verdadero Diferent Spirit

  1. Juan Diego lopez dice:

    Hola, tengo recien comprado un ds4, bueno mi padre, XD. Es un coche muy comodo, y chulo, pero tiene un pedazo de cristal gigante, y entra mucha calor…. Es verdad que a los citroens le falla la electronica? MERECE LA PENA, mi padre tiene el de 115 cv…. como anda.. JAJA. Es muy chulo en blanco nacarado. Y tiene buen rendimiento, cromados, estetica… lo unico que las ventanillas traseras no bajan. y hay poco espacio atras para una gorda jaja.

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