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Comentarios (0) Pruebas y Contactos

Contacto con el nuevo Citroën C4L 2.0i Tendance (by Parra)

A mediados de diciembre del pasado 2012, pasaron por nuestras manos 2 exponentes de la línea DS. En primer lugar probamos el DS3 (ploteado como el de Loeb) y pocos días después, el DS4, su hermano mayor. Y allí, comentábamos que el espíritu de ambos era bien diferente. Mientras en el DS3 podía hablarse de «deportividad pura y extrema», en el DS4 la palabra indicada era «confort absoluto». Y si bien es hermano mayor del pequeño campeón mundial de WRC, abandona los genes deportivos, adquiriendo un placer a bordo digno del segmento premium, lo mismo que su calidad constructiva.Y esto tiene mucho que ver con nuestro contacto porque, así como DS3 toma la «base» del C3 actual, DS4 se basa en el C4 hatchback europeo, del que deriva este C4L, lanzado originalmente en China (al igual que el C4 sedán anterior y su primo 408). Por lo tanto, muchas de las conclusiones sirven para ambos. ¿Es C4L un DS4 con baúl? Bueno, tampoco tanto. Las calidades son distintas y el diferencial de diseño en DS4 existe, pero comparten mucho del análisis. Mientras esperamos una unidad C4L rrometida por la marca, aprovechamos el préstamo de Parra Automotores, con el objetivo de tomar un primer contacto con el nuevo sedán de Citroën.

En términos subjetivos y relativos, si analizamos el diseño de C4L manteniendo en nuestras retinas el C4 sedán anterior, las diferencias son enormes. Pero no se trata de resultar vencedor frente a cualquier rival. El sedán de primera generación era realmente poco agraciado y no es tan meritorio ostentar una estética superadora. Pero no hace falta comparar ambos.

C4 Lounge tiene un diseño muy logrado, independientemente de cual fuere su ocasional rival en los papeles. El tercer volumen (cola) ha sido adosado con alta efectividad, dando la impresión que hubiera nacido como tricuerpo. Cintura y cola altas, con unas molduras en el lateral de su carrocería que le dan una fuerte personalidad. Tal vez el frontal sea el sector menos «trabajado» aunque no por ello falto de carácter. C4L es atractivo por donde se lo mire, y en lo personal, creo que la cola es lo mejor del auto en términos estilísticos. Interesante resolución de la tercera ventanilla; se sale de lo visto en el segmento. Por dentro casi «calca» lo visto en DS4, y conbina dos aspectos difíciles de encontrar simultáneamente: diseño y calidad. El habitáculo de C4L es muy atractivo, y a la vez con una alta calidad, no solo percibida (sensación) sino también en los materiales acolchados y muy buenas terminaciones. Es cierto que hay plásticos duros en contrapuertas y otros sectores, pero no hay mejores terminaciones en el segmento. Buen espacio interior, con un baúl no tan amplio pero muy cómodo para cargar, con boca de carga grande y piso bajo.A pesar que DS4 está posicionado más arriba, la terminación de C4L, repetimos, es muy buena. Aplausos también para ergonomía y practicidad de comandos. Muy buena Radio/CD/MP3/Bluetooth, con sonido de buena fidelidad y mandos muy prácticos. También elogiables los comandos de la climatización dual, muy eficiente por cierto. Lo único criticable podría ser la ausencia de navegador satelital, aunque forma parte del equipamiento de la versión siguiente, Exclusive. Muy prácticos mandos de la computadora de a bordo (la tìpica del grupo PSA, vista en modelos de ambas marcas desde hace tiempo y que podría renovarse a esta altura). Todo a mano y con accionamientos casi premium. Llamativa suavidad y silencio del comando de levantavidrios eléctrico, todo transmite confort y suavidad.Volante multifunción con mandos de audio y del Control de Velocidad Crucero, ambos muy prácticos. Citroën abandonó la idea de volante de centro fijo, solución usada en los actuales C4, innovadora aunque complicada para acostumbrarse. El espacio interior es bueno, aunque no sobra. Butacas muy cómodas, regulable en altura la del conductor (muy amplia), y junto con la doble regulación del volante, permite una posición de manejo excelente, de lo mejor visto en el segmento y más arriba también. El negro domina el interior, algo oscuro pero muy elegante. Cintura alta y vidrios pequeños aseguran baja visibilidad, pero no es crítica en este C4L. Para cerrar el tema interior, esta versión 2.0 Tendance cuenta con equipamiento suficiente, teniendo en cuenta su precio ($ 149.500 en esta etapa de preventa): climatizador dual, 4 levantavidrios eléctricos, espejos eléctricos, Cruise Control, doble regulación de volante, antinieblas, audio completo y de buen sonido, computadora de a bordo, frenos ABS+EBD y Asistencia al Frenado de Urgencia, apertura a distancia, y más.En el andar encontramos otro de los aspectos elogiables del nuevo C4L. Excelente compromiso entre confort y deportividad. Sí, hemos puntualizado que, al igual que su primo (¿o hermano?) DS4, no apunta al manejo deportivo, y no es un aspecto destacable, pero cumple razonablemente. Ahora, en lo que hace al confort, es digno de mención. En ciudad, en ruta, en caminos de tierra, en pavimento en buen estado, en mal estado, siempre, siempre, C4L mantiene un confort de marcha muy alto.

Con un motor 2 litros, ya conocido en el mercado argentino, muy progresivo, suave, y elástico, permitiendo transitar en 3ª en esquinas citadinas sin tironeos. Muy buen consumo en ruta, donde a 110 km/h la computadora de a bordo arrojó casi 14 km/l, valores eficientes. No tanto en ciudad donde orilló los 8 km/l. Pero claro, volvemos con un concepto repetido, ¿A cual consumo en ciudad nos referimos? O mejor dicho, ¿en que condiciones de tránsito, de temperatura, de desniveles se realiza la medición?

No tengo dudas que se pueden conseguir 11 km/l y más en C4L en ciudad. Pero ¿Es un valor representativo? Tal vez no. En resumen, el consumo en ciudad siempre es relativo; no obstante, en ciudad C4L es gastador pero muy poco en ruta. Lo único criticable -hilando muy fino- de este motor es su sonoridad a altas rpm; podría ser más silencioso. Dirección de asistencia variable, que en ruta (a velocidades altas) transmite cierta dureza, necesaria para el manejo en estas condiciones. La caja es eficiente, aunque si la exigimos (repetimos que la deportividad no fue condición de diseño para C4L) es algo lenta, pero en el manejo normal, familiar, cumple muy correctamente. Lo mismo para la tenida. No es un DS3, que parecía un scalextric. Sin embargo, a pesar de ciertas inclinaciones en la carrocería, dobla franco con seguridad suficiente para su perfil. Notamos un escaso quejido de las cubiertas en curvas de alta exigencia. Las Pirelli P7 225/45R17 se mostraron muy eficientes en los diferentes tipos de piso y manejo. Atractivas llantas de aleación.
Final de este breve contacto de C4L 2.0i Tendance, cedido por Parra Automotores. La nueva gama está en etapa de preventa, desde $ 145.000 del 2.0i Origine hasta los $ 193.000 del 1.6 THP Exclusive Pack Select. Garantía de 3 años en todas las versiones, elogiable.

En resumen, encontramos una excelente y muy competitiva opción para el segmento con el nuevo C4.

¿Virtudes? Muchas. Confort de marcha, diseño exterior e interior, suavidad, posicionamiento en precio, equipamiento razonable, muy buena calidad constructiva. ¿Defectos? Poco. Caja algo lenta (y podría ser de 6 relaciones a esta altura), motor algo ruidoso en alta, ausencia de navegador y display de computadora de baja resolución.
Citroën C4 Lounge. Muy buena opción familiar.

 

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