El origen de esta «bestia» alemana de 560 CV, 550 Nm y 1,270 kg (500 kg menos que el M4 «normal») se remonta a 1971, cuando BMW presentó el 3.0 CSL, sobre la base del 3.0 CS. La L («lightweight») de ligero mostraba las intenciones de la marca alemana para mejorar prestaciones disminuyendo peso, algo …