Hace poco más de 3 meses mostrábamos el nuevo BMW i8 que vió la luz primero como Concept y que, en versión de producción está por desembarcar en los concesionarios europeos. Si bien no es exactamente así, podríamos considerar a «i» como una submarca de BMW, destacada por diseños futuristas, con todo el glamour de la marca y un guiño a la ecología. Más que un guiño, diría total apuesta por los mundos híbridos y eléctricos.

La nueva gama «i» ya cuenta con 2 integrantes.

El i3, que ya se vende en Europa desde USD 47.000, un poquito menos que el Serie 3 Gran Turismo, siendo éste más grande y de un segmento superior. Pero claro, comparar modelos de espíritu y características diferentes es arriesgado, improcedente.

El i3 es 100% eéctrico, recargable, con un motor de 125 kW, prestaciones que asombran (0 a 100 km/h en 7.7 segundos, por ejemplo), con una autonomía de hasta 190 km (suficiente para la mayoría de las ciudades y usos habituales) y recarga total en menos de 6 horas. Si esto no es tecnología..

El i8, que aún no se vende en el viejo continente, pero está llegando, no es eléctrico, sino híbrido, contando con 2 motores. Uno naftero de 3 cilindros y 1.5 L (¡sí, leíste bien!) y otro eléctrico, y que en conjunto entregan prestacionales 357 CV. Con esta plataforma híbrida consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 4.5 segundos, con consumos miserables, y un diseño espectacular.

Pero i8 no solo es prestaciones y diseño. También es tecnología, con varios sistemas de vanguardia como comentamos en aquella nota sobre el modelo. Pero resaltan 2 «gadgets» interesantes. La iluminación opcional láser y la llave inteligente (Smart Key Fob) que nos ocupa en este caso. Respecto a la luz láser, solo diremos que supera ampliamente a la tecnología LED (ya de avanzada y prestacional).

Cuenta con un rango de alcance de 600 m y un modo absolutamente dinámico para adaptarse permanentemente al camino, a obstáculos lejanos y a otros vehículos en dirección contraria.

Pero la nueva llave inteligente también es una novedad, superando todo lo conocido en la industria automotriz. Se trata de una llave de tamaño algo más grande que las habituales de la marca y que, como principal característica, cuenta con un display LED de alta resolución y gestión computarizada que permite, además de entrar al i8 y ponerlo en marcha, controlar y visualizar una serie de funciones.

Manejar la climatización (algo de esto ya existe en la marca) y otros parámetros, pero además, conocer el estado on-line de carga de sus baterías, y por ende también el tiempo que resta para su carga total y la autonomía en cada instante, lo que permitiría, mientras, por ej., su conductor se encuentra cenando en buena compañía, sin necesidad de ir hasta su i8, saber como están los parámetros eléctricos para seguir viaje. Obviamente estas funciones serán absolutamente personalizables y formarán parte del i8 cuando llegue a los concesionarios (europeos y norteamericanos en una primera etapa).

Claro, 120.000 €/USD 155.000 que costará el i8 cuando desembarque en ambos continentes hacia marzo de 2014, no es un precio accesible per-sé, en términos absolutos. Aunque, si consideramos diseño, tecnología, prestaciones, exclusividad, suenan razonables. Esto es equivalente a un Serie 6 coupé o un Serie 7 Active Hybrid, a priori de segmento superior al i8, pero claro, es un modelo único en el mundo, y las comparaciones, generalmente odiosas, no tienen validez en este caso.

Descartado por ahora para Argentina, pero más adelante, ¿quien dice?