En un (muy) lejano final de 2015, Volvo presentaba al mundo su nuevo sedán de referencia, el S90, modelo que reemplazaba al S80. Claro que no hablamos de un modelo de grandes volúmenes de ventas; son segmentos más exclusivos, más de nicho. De todos modos, los sedanes de Volvo (y sus rurales) pueden ser considerados clásicos a esta altura. Pero si todo va hacia el mundo SUV, pickup y crossover… ¿que sentido tiene pensar en un sedan grande como este que nos ocupa en este caso? Quizás lo tenga. Hay que pensar que uno de los mercados (el principal) al que apuntará el nuevo ES90 será el chino (donde radica su propietaria Geely), y allí todavía tienen un mercado importante estos modelos.
¿Que se sabe del sedán ES90?
Bueno, no tanto. Sucederá al S90 que se vendió desde 2016 y lo sigue haciendo en algunos mercados, aunque se está despidiendo de varios, como por ejemplo del español, adonde se ofrecía en versión Recharge, híbrida enchufable. Si bien apunta al mundo eléctrico, también incluirá variantes híbridas. Apuntará al Tesla Model S, al próximo Audi A6 e-tron y al BMW i5 entre otros. En cuanto a las eléctricas, habría 3 opciones. Una de 280 CV, otra de 480 CV y otra de 520 CV, con una autonomía que rondará los 600 km. Además, en 2026 se incorporará su hermano menor eléctrico, el próximo ES60. Volvo ya ofrece sus SUVs EX90 y el reciente EX30.