Creo que todos estamos de acuerdo que «la M» de BMW no necesita presentación ni largas introducciones. Al igual que los AMG de Mercedes-Benz y los RS de Audi, los BMW M son objeto de culto, y más que aquellos, opinión personal. Hemos escrito muchas veces acerca de la división Motorsport de BMW, recordando que, dejando de lado al M1 (un modelo específico, conceptualmente distinto a los demás M), Serie 5 fue el primer modelo en contar con una versión M, allá por 1984. Como ocurre en casi toda la industria automotriz, los M vienen cambiando más que nunca en su historia. No solo estéticamente con los nuevos M3 y M4 (si bien es un cambio no exclusivo de estas versiones), sino también con la llegada de la movilidad eléctrica, en lo que constituirá el primer M eléctrico, el i4 M50.
Pero ahora, BMW Motorsport «da un paso más», convirtiéndose en desarrollador y productor de un nuevo modelo específico, y no modificaciones prestacionales de modelos BMW. El nuevo modelo se llamará X M (aunque podría cambiar por la similitud con el extinto Citroën XM). En contra de lo que podría pensarse inicialmente, el nuevo SUV de Motorsport no será totalmente eléctrico; sí adoptará tecnología PHEV (Plug-in Hybrid Electric Vehicle), la que incorporada al icónico motor V8 de 4.4 litros de los M de las Series más exclusivas de BMW, le dará una potencia que rondará los 700 CV (unos 100 CV que aquellos M nafteros). En cuanto a dimensiones, el X M será más grande que X6. Estéticamente solo ha dejado ver de manera sutil su frontal, con un aspecto similar al de su primo eléctrico iX. ¿Controvertido?, Sí, como todo lo que viene lanzando BMW en su nueva etapa de diseño. Veremos cómo queda la versión de producción cuando se presente.