La verdad es que me cuesta analizar este rumbo marcado por BMW. Más allá que se trata de un concept y que, más allá de mostrar un producto concreto, transmite hacia donde irá conceptualmente la marca en cuanto a diseño de sus modelos, la verdad me sorprende y mucho. Y no lo entiendo, a pesar de saber, insisto, que muestra una tendencia muy genérica hacia el futuro. Pero está tan distanciado de lo que actualmente presenta la marca, que no se termina de asimilar. No voy a poner yo en tela de juicio a todo el equipo de diseño de BMW; está claro. Simplemente manifiesto mi sorpresa. Vamos por partes.
El sector frontal, aunque cumple lo antes comentado, resulta el sector más «entendible». Con un nuevo concepto de «parrilla doble riñón», que ahora abarca todo el frente e incluye a las luces, que muestran algo de lo visto en el nuevo Serie 5. No resulta fácilmente digerible, pero lo comprendo y me parece acertado. El sector trasero ya no tanto. Faros que me recuerdan al Acura Integra de hace varios años, con un diseño limpio pero sin gracia, y hasta con cierta torpeza diría, exagerando. Y en el sector lateral, algo parecido. Alejado totalmente de los cánones actuales, de la industria automotriz y de la marca. Cintura baja, capot bajo, carente de la habitual sobriedad BMW y solo conservando, en cierta forma, la famosa curva de Hofmeister (nombre homenaje a su creador) en la ventanilla trasera. Angulos negativos en ambos extremos. Como mínimo, raro, difícil de digerir, convengamos.
No me considero radicalmente conservador, y de hecho he elogiado a las coreanas Hyundai y KIA por su innovación y la toma de riesgo en sus diseños, pero esto es tan radicalmente diferente a todo lo visto que no es sencillo de analizar. Vamos al interior. Allí la sorpresa, aunque existe, tiene menor impacto ya que todas las automotrices apuntan al minimalismo extremo, y este BMW Vision Neue Klasse (tal su nombre) no es la excepción. Casi sin comandos, salvo el reinterpretado comando circular histórico de la marca. Diseño despojado por completo, solo alterado por la pantalla central que, ante tanto minimalismo, queda como puesta a la fuerza en ese lugar. Todo esto entendiendo, de todos modos, que estamos ante un concepto que marca la tendencia de la marca para los años venideros.
No hay información técnica, más allá de estar ante un modelo eléctrico. También llama la atención que el concept sea un sedán, especie en extinción, lamentablemente. He probado muchos modelos de la marca y siempre he destacado sus grandes virtudes. Pero bueno, no tengo dudas BMW sabe hacer muy bien las cosas y por algo apunta a esta nueva dirección. Sabemos entonces que las parrillas XL están en retroceso; incluso se suavizaron en el reciente Serie 5 (y el eléctrico i5). Debo concederle el beneficio de la duda a BMW, automotriz que vaya si sabe hacer bien las cosas, aunque, no puedo ocultar mi desconcierto y sorpresa por lo que está mostrando como su camino hacia el futuro. Veremos cuando se plasme en el primer producto de esta nueva era, en 2025. Por lo pronto, se sabe que los próximos Serie 2 y Serie 1 se enmarcarán dentro de esta nueva filosofía.