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Este es el espectacular BMW X7 2019. Peso pesado


BMW X7. Hace poco más de un año mostrábamos el X7 concept, adelanto de lo que finalmente se transformaría en el nuevo buque insignia (al menos de la familia X) de BMW. Como suele suceder, cuando se muestra un concept, se radicaliza la estética, con soluciones que luego no pasarán a la versión de producción, y esto ocurre con casi todos los vehículos de concepto, en mayor o en menor medida.


Si hacemos la comparación visual entre ambos, veremos que, como era de esperar, el perfil se mantiene casi inalterado, salvo por las manijas de puertas que ya no son embutidas, algunos cambios de volumen suavizados, llantas de 23″ que pasaron a 20″ y en opción hasta 22″, y el resto, casi igual (todo esto fue anunciado en aquella nota). Ahora, si miramos trompa y cola, los cambios ya son apreciables. La enorme parrilla doble riñón (que en el nuevo Serie 3 «casi» es una sola integrada) curiosamente se mantiene inalterable, enorme, protagonista, desafiante, pero el resto es «menos minimalista».


Ahora ópticas y antinieblas son más «ortodoxos», aunque extrañamos del concept su atractiva simpleza en el frontal; ahora luce algo recargado. Atrás repite conceptos, ahora más «real». Adentro, finalmente, el paso al modelo de producción (será en Spartanburg, Estados Unidos, donde se producen todos los «X», salvo X1 y X2), solo retocó salidas de aire y algo de la consola central; el resto, casi igual. De hecho, el nuevo BMW X7 se muestra bastante conservador (no por ello menos atractivo) por fuera y bastante futurista por dentro.


El BMW X7 2019 está pensado -principalmente- para el mercado norteamericano, y cumple con la regla obligatoria del «big size«. Su longitud es de 5.15 m, bastante más que los 4.89 m del X5, su hermano que sigue en tamaño. Si lo comparamos con Audi Q7 (convengamos, un modelo grande), le saca 10 cm, y hasta se da el lujo de ganarle por 2 cm al bestial Mercedes-Benz GLS. Claro, si lo medimos con los big size norteamericanos, la cosa cambia. Por ejemplo, contra el GMC Yukon «corto», queda atrás por 3 cm y respecto al XL, hay más de medio metro de diferencia. Otra referencia, el Lincoln Navigator, llega a los 5.34 m en su versión «normal». BMW X7 está en el segmento de los SUVs grandes de Estados Unidos.


Veamos algunos datos disponibles. Comencemos por la parte mecánica. X7 tendrá dos motores diesel y uno naftero, al menos inicialmente (¿no estaba decretada la muerte del diesel?). BMW X7 xDrive 30d, con el 3 litros y 6 cilindros (en línea, claro) y 265 CV. Por encima, el radical X7 M50d, con 400 caballos, y una aceleración de 0 a 100 km/h en 5.4 segundos. Como referencia directa y nuestra, aquel BMW M235i que probamos hace un tiempo, ostentaba 4.8 segundos, con cientos de kilos menos y varios puntos a favor para esa prueba.


En cuanto a la variante naftera, el X7 40i, con nada despreciables 340 CV, provenientes del eterno y muy eficiente 6 cilindros de 3 litros. Tan eficientes son estas plantas motrices de 6c/3L en diesel y nafta, de BMW, que se mantienen desde hace tiempo y son casi insuperables. Para las 3 versiones, caja Steptronic de 8 relaciones; caja sobre la que BMW asegura haber practicado un seteo específico para el X7, mejorándola aun más. Suspensión neumática, y en opción, adaptativa.


En cuanto a equipamiento, destaca su techo solar de 3 segmentos, que «llega» a las 7 plazas; plazas que pueden elegirse como 7 (la tercera fila es completa) o como 6, con dos butacas finales, y las 6 cuenta con reglajes eléctricos. BMW asegura que el espacio de éstas no tiene nada que envidiarles a las 3 traseras, y no son simbólicas y/o incómodas, como en muchos modelos. También, su climatizador de 4 zonas, que como opción puede transformarse en 5 zonas… Por otro lado, su «keyless system» para entrar y salir y poner en marcha, puede hacerse desde el smartphone, eliminando la necesidad de la llave (o en todo caso pudiendo quedar como back up).


En seguridad, destacan el Active Cruise Control, que lo transforma en un autónomo de cierta precariedad, claro, el Driving Assistant Professional, Lane Keep Assist, Priority Warning (avisa si en un determinado cruce no se tiene prioridad de paso).

También el Wrong Way, que tomando datos del navegador y el reconocimiento de señales, alerta si se está transitando en contramano. Completa dotación en seguridad.


El nuevo BMW X7 llegará a los concesionarios a partir de marzo de 2019, y ya puede reservarse en Estados Unidos, con un depósito de USD 1,000. Aunque no lo descartamos plenamente para el mercado argentino, vemos poco probable su arribo, aunque ojalá estemos equivocados en nuestro pronóstico. Y tampoco podremos verlo en el Salón de Buenos Aires 2019, ya que todo indica que ha sido cancelado. Una pena.

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