Renault Megane. El sucesor del exitoso y recordado R19, el que fue lanzado en 1995, incorporando una inédita versión tricuerpo que se fabricó en Argentina. Renovado en 2002 (creo, la generación más atractiva de Megane, en todos sus formatos) y 2008, y a fines del pasado 2015 llegó la 4ª generación, en configuración -solo- 5 puertas (por primera vez en su historia), y, como es habitual en Megane, innovando en diseño; siempre distinto a lo que se ve en la competencia.

La segunda serie de Megane (II) incorporó la sigla RS, contando con 225 CV (algo más en el «R26»), y en la pasada que aun se vende en Argentina, trepó hasta los 250 CV, luego a 265 CV, y 275 CV para la serie «Trophy», la que se sigue vendiendo en el viejo continente, a pesar de contar ya con Megane IV en el portfolio de la marca francesa. Más aún, las autoridades de Renault han confirmado que habrá Megane III RS Trophy hasta 2017, año en que hará su debut el Megane IV RS que nos ocupa en este caso.

Si bien, en general, todos los modelos (y sobre todos los deportivos) de distintas marcas van ganando potencia con cada nueva generación (y en algunos casos, muy efectivamente, reduciendo pesos, como Porsche), Megane IV RS deberá superar el umbral de los 300 CV. Tengamos en cuenta que sus principales rivales (Volkswagen Golf GTI, Ford Focus RS, Honda Civic Type R) están en ese orden de potencia, o superior. Y la verdad es que, entregando ya 275 CV, «incorporar» otros 30 caballitos, no es algo inverosímil.

El nuevo (próximo) Megane RS, además de contar con 300 CV plus, incorporará las 4 ruedas directrices (ningún desafío para Renault), y caja manual de 6 relaciones, con la posibilidad de sumar la EDC de doble embrague. Hoy, lo más cerca al RS en la nueva generación Megane, es el GT, equipado con el 1.6 TCe de -nada despreciables- 205 CV (USDS 33.000 en Europa), aunque claro, lejos del radical RS. Aunque Renault Argentina sigue mostrando en su página oficial al RS III (250 CV), no se comercializa en este momento. En el viejo continente, el RS Trophy cuesta USD 31.000.

Estéticamente, claro, adopta el diseño de Megane IV «normal». Encontramos un frente más agresivo, profundizando las líneas horizontales que bajan en el centro, con un logo más protagonista, y «bajos deportivos».

Como era previsible, el perfil es el sector «menos distinto» a sus hermanos, y atrás encontramos razgos del Alpine A110/50 Concept. Con luces LED muy sutiles y en todo su ancho. Agresivas salidas de escape.

Gran expectativa por la nueva generación de Megane RS (IV). Llegará a los concesionarios europeos en 2017 (seguramente presentado previamente en el Salón de París), y debería arribar a nuestro país a fines de ese año, tal vez a principios de 2018. Ojalá. Por ahora, debemos conformarnos con las pocas imágenes disponibles.