Con el comienzo del otoño de este 2021 dábamos cuenta del fin oficial del Ford Mondeo (ya lo veníamos adelantando desde hacía tiempo) y también de la decisión de Volkswagen de no desarrollar más motores a combustión, para centrarse de manera absoluta en la movilidad eléctrica. Clara muestra de esta decisión la constituye, por ejemplo, la especulación (fundada) respecto a que la actual del Golf 8 sería la última generación del otrora muy exitoso modelo. ¿Falta agregar algo? Bueno, podríamos decir que ya está desarrollando el eléctrico ID.3 deportivo, por ahora concept, el ID.X, que tendrá la misión de sustituir, más temprano que tarde, al Golf GTI. Y ahora más noticias, en este caso de Audi, una de las marcas del grupo.

Audi ya está trabajando en el próximo RS 4 eléctrico, aunque tendría algo de sobrevida el RS4 naftero. Y también el próximo A6 también eléctrico. La movida no tiene descanso. Casi en ninguna marca. Lo cierto es que Audi ha anunciado que a partir de 2026, si bien seguirá vendiendo algunas variantes con motores a combustión, se dará el final oficial de este tipo de motores, al menos en cuanto a desarrollo. De hecho, en ese 2026 casi seguramente habrá más versiones eléctricas que nafteras y diesel en el portfolio de la alemana. Mercedes-Benz también viene avanzando fuertemente en el mundo eléctrico, y BMW algo menos, convencida que aún queda vida para los actuales motores. De todos modos, ya ha presentado un i4 M50, algo así como «el M4 eléctrico».