En marzo de 2020 presentábamos la 4a generación del Audi A3, un muy interesante modelo, con buenas ventas, pero que, está redefiniendo su futuro. Por lo pronto teniendo en cuenta que la próxima generación será eléctrica, algo acorde a la filosofía eléctrica actual de Audi, tecnología en la que viene realizando grandes inversiones. Pero además, dejará de ser un «ortodoxo» hatchback (y sedán) para mutar hacia un mundo más actual, el de los crossovers, con algo de SUV. Se acercará conceptualmente al actual Q3, para resumirlo de algún modo. A mediados del año pasado mostrábamos al nuevo RS 3 ,que mantenía su eficiente motor de 2.5 litros y 5 cilindros, con 400 CV de potencia y 500 Nm de Par motor. Ahora, tal vez como una versión de despedida del A3 tal cual lo conocemos, Audi presenta el RS 3 Performance Edition, con algunos detalles personalizados.

Por el lado de la mecánica, si bien mantiene el motor 2.5 TFSI de 5 cilindros, con una mayor presión del turbo consigue elevar la potencia hasta los 407 CV (+7 CV), que no son determinantes, pero al menos «en los papeles» representan una mejora. La caja de doble embrague S-Tronic de 7 relaciones se mantiene, como así también diferenciales deportivos y otros elementos del RS 3 «normal». También se mantiene sin cambios el torque, de 500 Nm, solo que disponible en un rango mayor de vueltas. La Suspensión Adaptativa es de serie en esta versión Performance Edition y sus neumáticos, Pirelli P-Zero Trofeo R, 265/30R19 atrás y 245/35R19 adelante. La aceleración de 0 a 100 km/h no ha cambiado: 3.8 segundos.

Estéticamente, apenas algunos detalles diferenciales. Nuevas llantas oscurecidas, específicas de la versión, y doble alerón trasero, el inferior de gran tamaño, como lo más notorio a nivel visual. En el interior disponibles butacas tipo baquets con Alcántara. Serán solo 300 unidades, tanto en carrocería hatchback como sedán, y su precio en Alemania será de 77,000 euros; algo más seguramente en los otros mercados. Descartado para Argentina. Este Audi RS 3 Performance Edition representa lo más extremo de A3, y de alguna forma marca el inicio de un camino final, ¿sin retorno? para el exitoso hatchback, que está viviendo sus últimos años de vida (y no muchos), como tantos otros modelos de la industria automotriz.