Gracias a las actuales tecnologías, programas y este mundo global, cada vez más «aldea» en algún sentido, proliferan, como nunca antes recreaciones y especulaciones acerca de las nuevas generaciones de diferentes modelos. Algunas, simples interpretaciones, y otras, reforzadas con lo visto en unidades camufladas, suelen acertar bastante en lo que al aspecto de un modelo se refiere. En este caso, creo que apunta de manera bastante bien orientada a lo que será la nueva generación de la Sportage (exageración mediante), y que al igual que su prima hermana Huyndai Tucson, implicará un cambio estético radical, profundo, conceptual.
KIA pertenece al gigante asiático Hyundai, y en general modelos equivalentes de ambas comparten mucho de sus componentes (Atos/Picanto, Pallisade/Telluride, Sorento/Santa Fe, etc). De todos modos, en la actualidad, llevan a cabo un proceso de diferenciación visual muy marcado, manteniendo las plataformas comunes a ambas marcas. Hyundai Tucson 2021 implicó un cambio drástico respecto a la anterior, y de la misma forma (en términos cuantitativos) esta nueva KIA Sportage que la marca coreana está terminando de «poner a punto», implicará un concepto estético diferente, arriesgado, como suelen ser los actuales diseños de ambas marcas.
No solo serán novedades estéticas. Por primera vez, Sportage incluirá una versión de 7 plazas. Contaría con 2 motorizaciones híbridas: un 1.6 con 230 CV y otra enchufable (PHEV) con 180 CV. Probablemente en el mercado norteamericano conserve el 2.5 naftero de 190 CV. En seguridad contará con diversos sistemas actuales, sobre en todo en lo que hace a Seguridad Pasiva. Estéticamente su principal sector transgresor será el frontal, aunque no será tan drástico como el que ilustra la imagen. Tendrá una parrilla de gran tamaño, pero seguramente más «ortodoxa» que aquella. Veremos cuando se presente, en 2022, llegando a Argentina poco después.
