Hace unos 3 meses mostrábamos la nueva generación del Audi A5 (en realidad se trata de un restyling), en ese caso en el formato Sportback (5 puertas). Recordemos que Audi A5 fue lanzado en 2007, como un desprendimiento del sedán A4, compartiendo plataforma, convirtiéndose rápidamente en referencia del segmento. Unos años después, en 2010, y luego del nacimiento del S5, su hermano deportivo menor, llegaba el RS5, ya desde el arranque con 450 CV, aunque, en aquella generación con un V8 de 4.2 litros, motor que luego seria reemplazado por el actual 2.9 TFSI V6, manteniendo la potencia. Claro, aunque no ha sufrido aumentos de potencia, sí ha evolucionado mucho, desde lo tecnológico y su equipamiento.
Recordemos que en Argentina, Audi vende el RS5, aunque solo en formato coupé, y pre-restyling, ya que el nuevo modelo llegará a los concesionarios europeos en el primer trimestre del próximo año, y debería llegar a Argentina (si nos olvidamos por un momento de la coyuntura económica y del sector automotor) hacia mediados de año, quizás tercer trimestre. El Audi RS5 se venderá en versiones Coupé y Sportback, con una potencia de 450 CV provenientes del 2.9 TFSI, con caja Tiptronic de 8 relaciones, Tracción quattro, Suspensión Adaptativa, Diferencial Trasero Activo y frenos cerámicos en opción. También tendrá los botones RS1 y RS2 en el volante, como parte de las opciones del Audi Drive Select.
Estéticamente recibe cambios leves similares a los del resto de la gama A5 con la puesta al día de hace unos meses. Cambios internos en ópticas (en ambos extremos), parrilla «más ancha» y de menor altura, sector antinieblas levemente rediseñado, nuevos paragolpes también atrás y nuevas llantas de 20″ de diseño específico. En el interior, cambios más leves aún, casi imperceptibles. Sutil puesta al día para el Audi RS5, referente prestacional del segmento, como para enfrentar la última parte de su ciclo comercial (como generación).