Lanzado a mediados de 2022 (ver nota), como la contracara Peugeot del Citroën C4X (aunque este fue presentado posteriormente), el 408 está en tiempo de recibir un restyling de mitad de ciclo. Y como suele ocurrir en la industria automotriz, afectará principal y casi únicamente al sector frontal, el que recibe habitualmente los cambios en las actualizaciones. El 408 es uno de esos tantos modelos actuales, difíciles de encasillar, de definir, de encuadrar. No es sedán, no es fastback, no es coupé, tampoco SUV; quizás un poco de cada uno.
Peugeot lo está trayendo a Argentina, habiéndolo lanzado comercialmente. Son esas decisiones de las automotrices (y hay ejemplos de muchas) que no se terminan de entender. Traer el actual 408 ahora, cuando en 2026 recibirá el restyling, no resulta muy lógico. También es cierto que las decisiones sobre lanzamientos (sobre todo cuando son industriales, que no es este el caso) llevan su tiempo de maduración, y a veces ocurre que llegan algo tarde. Lo cierto es que los cambios serán solo visuales y leves, tomando el estilo frontal de su hermano 308.