Porsche Boxster. ¿El sacrilegio? Casi. Hoy Boxster goza de excelente salud y mejores ventas, pero cuando fue presentado a comienzos del presente siglo, implicó casi una «herejía» para los fanáticos de la marca. Claro, acostumbrados a 911, pensar en un Porsche más chico, más «mundano», más humilde, era -casi- para «la hoguera». Algo similar a lo sucedido con la historia del -hoy venerado- Cayenne.
Boxster nació con una longitud de 4.31 m y en sucesivas renovaciones fue creciendo, hasta llegar a los 4.38 m del actual. De todos modos, para la media de la industria del automóvil, su crecimiento ha sido contenido. Claro, su hermano 911 acusa 4.5 metros, con lo que no le queda mucho margen para desarrollarse hacia arriba. Boxster luego tuvo su hermano «cerrado», el Cayman, a título personal, «el Porsche más atractivo de la actualidad».
La marca alemana ha decidido dar un nuevo «empujón» a Boxster, por lo pronto cambiando su denominación (parcialmente). Ahora es Porsche 718 Boxster, y 718 Boxster S. ¿Y porque ese curioso nombre?
Bueno, 718 fue un exitoso modelo de competición de Porsche que brilló en los comienzos de la década del 60, con un diseño simple y un peso contenido. Este 718 Boxster rinde homenaje a aquel, su abuelo.
Una de las características más importantes y distintivas del nuevo modelo (en realidad una «pasada en limpio» del actual Boxster) aparece con su motorización. Porsche abandona el histórico 6 cilindros boxer (cilindros opuestos) del Boxster actual y echa mano a un 4 cilindros/2 litros para el «normal» y otro 4 cilindros pero de 2.5 litros para el Boxter S. Y además, deja de utilizar motores aspirados, para recurrir al inevitable turbo. El actual (anterior a estas alturas) Boxster equipa un motor de 6 cilindros y 2.7 litros, con 265 CV y la versión S, el 3.4L y 315 CV. Grandes cambios, ahora turbo, menos cilindros, aunque, siguen siendo boxer.
Ahora, el 718 Boxster entrega 300 CV y el S, 350 CV, con un crecimiento de 35 CV para ambos. A pesar del incremento en potencia, Porsche asegura que los nuevos motores reducen su consumo -casi- en un 15%, obteniendo el «normal», 10 km/l en ciudad, cifra realmente para el asombro. Con motor en posición central y tracción -obviamente- trasera, el S llega a los 100 km/h en 5.1 segundos con la caja manual de 6 cambios (4.9 seg en la variante con caja PDK de doble embrague y 7 relaciones).
Como opción, el Porsche Active Suspension Management (PASM) que controla y regula electrónicamente las suspensiones. También opcional el Porsche Sport Chrono, que mejora la respuesta del motor, consiguiendo mejores performances. La tecnología, y sobre todo en seguridad, estará presente en los nuevos 718 Boxster, con Asistente de Cambio de Carril y Control de Crucero Activo entre otros sistemas de seguridad activa. La información y comunicación pasan por el Porsche Comnunication Management (PCM).
Vamos a lo que solemos abordar primero habitualmente, el diseño. Los nuevos 718 Boxster muestran una silueta muy agradable, deportiva, con una imagen robusta, muy lejana de aquellos primeros Boxster, que parecían «más de juguete» (Modo exageración: On). En el frontal encontramos leves cambios, básicamente en la zona de ópticas y bajos del paragolpes. Perfil inalterado. Atrás los cambios principales; nuevas ópticas oscurecidas y cambio en paragolpes y sectores bajos, muy logrado. En el interior solo pequeñas variaciones en las salidas de climatizador y consola central (y volante, con mandos a distancia distintos a lo visto en otros modelos, raro).
Los precios de venta del nuevo modelo (que está disponible en el viejo continente) son de USD 63.000 para el Boxster y USD 81.000 para el Boxster S. El renovado cabrio de Porsche debería arribar a nuestro país hacia 2017. Ojalá.
