Hace unos 15 días dábamos cuenta del relanzamiento de la Alianza Renault-Nissan (y Mitsubishi), algo muy importante para las 3 automotrices que la conforman (sin olvidar a Dacia y a Alpine, partes de Groupe Renault). Mitsubishi, muy prestigiosa compañía japonesa, está a la cola de la alianza, claro. Es una pena que siendo tan conocida y valorada históricamente por sus excelentes productos, esté pasando uno de sus peores momentos. Claro que hay nuevos desarrollos en carpeta, pero en el corto plazo, en el mercado europeo tendrá dos modelos «populares» by Renault.
El ASX, basado en Captur (también lo hará en la próxima generación del ex monovolumen) y el Colt que nos ocupa en este caso, basado en el actual Clio y en su próximo restyling. Compartirá por lo tanto la plataforma CMF-B y no presentará grandes diferencias con el modelo francés, salvo en el sector frontal, adaptado al espíritu de la japonesa, copiando la nueva firma lumínica que tendrá el Clio. Mitsubishi se está restructurando, es una excelente noticia, y las novedades europeas en el corto plazo (también eléctricas) pasarán por algunos productos Renault, y no está mal en un contexto económico complicado como el que tiene la excelente automotriz asiática.