Salvo los más jóvenes, casi diría adolescentes, muchos han conocido nuestro Jeep Gladiator, aquella pick up que Ika-Renault fabricara en Argentina allá por los 70`s. Pues aquella pick up rústica -podríamos convenir- es abuela del Jeep Cherokee que conocemos hoy (y que en su última y 4ª generación se rebautizó Liberty en algunos mercados).
Cherokee -como tal- nació en 1974, con 3 renovaciones generacionales en 1984, 2002 y, la actual, en 2008. Salvo la presente(pero no con el útimo restyling, bien cuadrado), todas han conservado cierta rudeza en el diseño, formas angulosas, tal vez algo pesadas, pero a su vez mostrando (o transmitiendo) fortaleza.
En el próximo Salón del Automóvil de Nueva York, Jeep hará debutar oficialmente al Cherokee 2014, modelo protagonista de esta nota. Y la misma Jeep ha adelantado algunas fotos (ninguna de su parte trasera ni de su interior), para evitar especulaciones. Como hemos comentado en otras oportunidades, en los últimos tiempos las automotrices se «ven obligadas» a mostrar oficialmente sus creaciones no develadas, antes que proliferen en la red especulaciones o fotos espía que «desvirtúan» el espíritu de tales modelos.
Siendo -justamente- Cherokee sinónimo de líneas rectas y conservadurismo estético, resulta bastante arriesgado lanzar la nueva generación tan distinta a aquel espíritu. Con plataforma Fiat (Dodge Dart/Alfa Romeo Giulietta), el nuevo Cherokee 2014 abandona por completo los trazos duros y rectilíneos, adoptando un estilo fresco, que solo muestra Compass en toda la gama Jeep.
Su parrilla, que conserva los 7 sectores verticales, cuenta con dos volúmenes, y lo más llamativo resulta la selección de las ópticas, simulando ser antinieblas. Como también solemos expresar precautoriamente, no son pocas las veces que un determinado modelo, «en persona» se muestra muy distinto a lo que aparenta en fotos, y por lo tanto, intentamos ser cautos, sin perder la posibilidad editorial de dar nuestra impresión sobre el diseño. Y así como nos encantan Grand Cherokee, Patriot y Wrangler (algo menos Compass) en cuanto a diseño, la nueva Cherokee no termina de convencernos. Lamentablemte nos devuelve -con varias diferencias- el diseño de aquel Pontiac Aztek, tan criticado por sus osadías y poca belleza en partes iguales.
Más allá de esto, que es absolutamente subjetivo y opinable, Jeep asegura que la nueva Cherokee ha mejorado su rendimiento (consumo) en un 45%, cifra elogiable, por cierto. No hay data respecto a su mecánica, pero no presentaría grandes novedades. Y aunque menos información hay al respecto, me animo a sospechar que será vendida como Fiat en algunos mercados del mundo (no el Argentino).
¿La tendremos en Argentina?
Es muy probable, aunque hacia fines de 2014, no antes. Allí podremos opinar con mayor rigor científico sobre su diseño, aunque siempre será -afortunadamente- algo totalmente discutible y opinable.