Hagamos un poquito de historia. En el segmento compacto (C), las premium alemanas compiten fuertemente. Comenzó Audi, con su A3 en 1996, y en esa primera generación era -casi- un Volkswagen Golf mejor terminado. Mercedes-Benz lanzó Clase A (bastante más chico) en 1997, y recién en 2005 presentó un serio competidor para Audi, el Clase B, que si bien compartía plataforma con su hermano menor,  contaba con las mismas dimensiones que el A3. Un año antes, en 2004, BMW introducía su automóvil más pequeño, el Serie 1, desarrollo específico, ya que los Compact eran tricuerpo y además derivaban del Serie 3.

Con Audi y BMW recién renovados (manteniendo estéticas), Mercedes-Benz sabía que necesitaba algo más que una aplicación de botox para que su Clase A brillara en el segmento.
Y vaya si lo hizo. El nuevo Clase A que ya puede comprarse en los concesionarios europeos creció 41 cm, llegando a los 4.29 m de longitud, entre 5 y 7 cm más que aquellos.
Y es raro, porque incluso se acerca mucho a las dimensiones del Clase B, que se supone es su hermano mayor.
Más aún, los precios del nuevo Clase A se solapan con los de aquel. Ahora son primos.

Pero no solo ha crecido en tamaño; ha mudado drásticamente de filosofía. De aquel monovolumen -algo soso- a este deportivo elegante, los cambios han sido totales. Su Cx (aerodinamia) es de 0.27, valor excelente para un auto de serie, que debe tener cierta habitabilidad y altura mínima.

A pesar de mantener su característica de hatchback (cola corta), su aspecto es tan diferente, que nadie podría adivinar que se trata del heredero del actual Clase A.

Inicialmente, los concesionarios europeos ofrecen 5 motorizaciones, dando lugar a 6 versiones.
Comenzando por los nafteros, tenemos el A180 Bluefficiency, un 1.6 de 122 CV, con el que llega a los 202 km/h y acelera de o a 100 km/h en 9.2 segundos, con un rendimiento de combustible en ciudad de 13 km/l, muy eficiente. Arranca en los USD 31.000.
Sigue el A200 Bluefficiency con el 1.6 de 156 CV, A250 BE y el motor de 2 litros y 211 CV, y el A250 Sport, con el mismo motor pero una estética más deportiva, trepando hasta los USD 48.000.

En diesel, 2 opciones. A180 CDI Bluefficiency, con el 1.5 L de 110 CV (USD 34.500) que le permite llegar a los 190 km/h, acelerar de o a 100 km/h en poco más de 11 segundos. Muy buenas cifras para un diesel, mucho más cuando obtiene un rendimiento de más de 20 km/l en ciudad.
Creo que es la mejor opción de la gama. Y por encima, el A200 CDI BE, con el 1.8 de 136 CV y un plus de USD 2.000.

Contando ahora Mercedes-Benz con 2 modelos para rivalizar con Audi A3 y BMW Serie 1 (Clase A y Clase B), incorpora equipamiento que nada tiene que envidiar a sus hermanos mayores. Además del habitual en confort, se destaca en seguridad, ofreciendo de serie Dirección Asistida Variable, ABS, 7 Airbags, Controles de Tracción y Estabilidad, Collision Prevention Assist, y otros como Filtro de partículas y Dirección asistida variable.
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La lista de opcionales es muy amplia. Puede optarse por Packs AMG, Alumbrado y Visibilidad, Dinámico Avanzado, Noche, Caja de doble embrague 7G-DCT, Ayuda al estacionamiento Parktronic, Airbags traseros laterales, Climatizador Thermotronic, y la lista sigue.

La pregunta de siempre, ¿llegará el nuevo Clase A a nuestro país?

No puedo asegurar que así ocurra. El Clase A anterior no tenía chances de arribar, aunque el actual, crecido en dimensiones, calidad y equipamiento, cuenta con interesantes probabilidades de arribar al mercosur; incluso se especuló con que podría fabricarse en Brasil, algo no confirmado.
De llegar, lo haría recién en 2013. Esperaremos.